De izq. a dcha. José Antonio Arias, Esteban Jiménez y Vicent Llorens, de la administración 3 de Vila, muestran su apuesta por el 50770 para el sorteo. | (c) Sergio G. Canizares

La venta de lotería de Navidad se activó en verano y, desde entonces, las administraciones experimentan un goteo de visitas en busca de números de todo tipo.

A diferencia de otros años en los que predominaban números especiales que se correspondían con fechas señaladas, este año la ilusión en forma de décimo de lotería no tiene unos números que destaquen sobre otros. Pese a ello, en la administración número 3 de Vila (de Mercedes Mayans) ya hay números que se han agotado, como el 13886, el 89984 o el 22423. «Hay otro número que se está vendiendo mucho, que es el 64322 pero desconozco el motivo porque nadie me lo quiere decir; parece como si alguien lo hubiese predecido», explicó José Antonio Arias, empleado de esta administración, quien afirmó que también se están vendiendo muchos décimos para la Península, incluso on line.

Repunte

«Cuando más ventas hemos tenido es en agosto y ahora se están volviendo a animar; hay mucha gente que al acabar la temporada aprovecha antes de irse y compra décimos en la isla», precisó Arias. En esta misma línea se expresó Vicente Ribas, propietario de la administración número 4 de Vila. «Hubo muchas ventas en verano y a partir de ahora se empezarán a reactivar de nuevo. Los que más están saliendo son los terminados en tres, siete, cinco y 13, que es el que primero se suele agotar. Este año no hay ninguno que sea de los más vendidos», aseguró Ribas.

Si bien no hay un número o números que sean de los más vendidos, en la administración número 3 de Vila hacen una apuesta clara por el 50770. «Tenemos toda la serie; lo elegí yo y ya llevamos vendidos unos 500 décimos. Es mi apuesta personal porque quiero demostrar que los números feos también pueden tocar y espero que así sea», precisó Arias, quien explicó que en septiembre un grafitero pintó la persiana de esta administración de lotería para así animar a apostar por este número.

Tanto Ribas como Arias coinciden en afirmar que el sorteo de Navidad tiene más probabilidades de que toque que otros premios, como el Euromillones. «Hay que animarse a probar suerte», concluye Ribas.