La intención de los talleres y las actividades es que vuelva el público. | (c) Sergio G. Canizares

Mañana, a partir de las 09,30 horas, RicJazzbo acudirá al Mercat Nou para amenizar con su música a todos los que acudan a comprar, por ejemplo, una barra de pan a 60 céntimos. Además, el próximo sábado el mercado acogerá un taller en el que se explicará cómo comprar y limpiar pescado. Siete días después, habrá otro taller de cocina para niños, y para terminar noviembre se llevará a cabo la actividad Temps de matances con degustación incluida de embutidos y boniatos.
Estas actividades, más una fuerte campaña en Internet y las redes sociales, desde hace días ya funciona el perfil del Mercat Nou en Facebook, han sido diseñadas por B&N Marketing en colaboración con el Ayuntamiento de Vila para relanzar el lugar. Algo que ha sido muy bien acogido por los comerciantes del emblemático lugar. «Todo las actividades para dinamizar el Mercat Nou son bienvenidas porque si queremos seguir vivos no podemos quedarnos con los brazos cruzados», aseguró ayer su presidente, Agustín Pineda.
En este sentido, Pineda explicó que al quedar la reforma del mercado «en stand by» es necesario «ponerse al día y no entrar en una guerra de precios sino en saber ofertar mejor que nadie valores propios como la calidad de nuestros productos o la atención personalizada».
Una idea que pasa, según el presidente de los comerciantes, por llegar a un público mucho más amplio. «No están las cosas para privarnos de nadie y como hay muchos jóvenes que buscan otro tipo de comercio que no son las grandes superficies creo que jugarán un papel fundamental las redes sociales e Internet para tenerles informados de todo lo que hacemos y ofrecemos».
Puestos en alquiler
Otro de los objetivos principales que persigue esta campaña es conseguir volver a los tiempos en los que todos los puestos estaban ocupados y, «si no se puede, que al menos no sigan aumentando los veinte que actualmente hay cerrados».
Por ello, Pineda aseguró que además se están estudiando nuevas alternativas para conseguirlo. «Los grandes problemas que siempre nos encontramos son los de una normativa excesivamente rígida para conseguir un puesto o que las concesiones duraban muchos años, y por eso, desde hace tiempo estamos pensando en que tal vez se podrían ofrecer en un servicio de alquiler». De momento, la puesta en marcha de este sistema no se ha hecho efectiva ya que según Pineda «todo depende de la agilidad del Ayuntamiento de Vila»