El presidente del Consell d'Eivissa, Vicent Serra, durante el discurso del Día de la Constitución.

El presidente del Consell d’Eivissa, Vicent Serra, defendió ayer que se puede abordar la reforma de la Constitución, siempre y cuando se realice con el consenso de todos. «Si somos capaces de recuperar el espíritu de 1978 seremos capaces de reformar una Constitución que no tiene porque no modificarse, porque todo se tiene que actualizar», afirmó Serra, que, no obstante, apuntó que antes de hacer modificaciones «tenemos que llegar a un acuerdo, porque ponemos en peligro todo el sistema que la sociedad ha construido de una forma muy coherente y cohesionada; y cualquier otro planteamiento es asumir un riesgo que no conviene asumir».

Serra recalcó que «si releemos los 169 artículos de la Constitución, la gran mayoría de ciudadanos estaremos de acuerdo con ellos, con lo que no tendría sentido modificar un texto si no tenemos claro a donde queremos ir ni qué beneficios supondrán los cambios».

Corrupción

Estas manifestaciones las realizó ayer el presidente durante el acto de conmemoración del 36 aniversario de la Constitución, en el que aprovechó su discurso para hacer una crítica por los casos de corrupción que salpican a la clase política. Serra reconoció que «en esta época al hablar de política los ciudadanos lo hacen con total desconfianza». «Hay personas que se han aprovechado de sus cargos no para ayudar a los demás, sino a ellos mismos, y han causado un daño que tardará tiempo en recuperarse», manifestó el presidente, que recordó que «no es momento de autohomenajes ni de triunfalismos». No obstante, hizo un llamamiento para revalorizar la figura política y reivindicar el papel de aquellas personas que hacen política de forma honrada y «se atreven a dar un paso adelante con ilusión para trabajar con dedicación y sacrificio». «Los que formamos parte de partidos políticos somos los primeros que tenemos que poner en valor a la gente que se dedica y se dedicará a la política», resumió al concluir el acto. En este sentido, defendió «la política en mayúsculas». «No existe una clase política, porque todos, absolutamente todos, hacemos, o tendríamos que hacer política», destacó Vicent Serra, que apuntó que se hace política en los partidos, pero también en las asociaciones de vecinos, las entidades sociales, los clubes deportivos o en actos ciudadanos. «Entre todos tenemos que conseguir que el hecho de participar sea motivo de orgullo, y no de sospecha permanente», señaló.

El acto también contó con el discurso del primer alcalde de Eivissa, Joan Prats, que asumió el cargo entre 1979 y 1983. El expolítico aseguró que «cada día está más claro que los españoles tendremos que asumir el reto de una revisión obligada de la Constitución» y reivindicó una reforma de la administración para evitar duplicidades, en la que propuso, por ejemplo la eliminación de ayuntamientos.

Sobre este tema también hizo referencia el presidente del Consell, Vicent Serra, que recordó que «tenemos una estructura administrativa desde hace siglos, por lo que habrá que agilizarla. Eso quiere decir eliminar estructuras administrativas y en este paquete está, por supuesto, la eliminación de municipios y adaptarlos a la sociedad actual, que avanza más deprisa que las instituciones».