Una treintena de vecinos quisieorn conocer de cerca el plan que debe proteger la sierra de sa Murta.

Una treintena de personas participó ayer en una excursión organizada por la Asociación de Vecinos des Rafal Trobat y cuyo principal objetivo era dar a conocer los trabajos realizados dentro del Plan de Defensa Forestal que ha elaborado esta entidad durante los últimos tres años en la sierra de sa Murta.

El recorrido se inició en el Club de Campo y discurrió por caminos y senderos para llegar a la parte más alta de la Nova Venda des Rafal Trobat, donde la entidad ha creado un anillo de seguridad que serviría de punto fuerte para que los medios terrestres puedan combatir las llamas en caso de un incendio en la zona.

También se pudieron contemplar los trabajos de limpieza, desbrozado y mejora de los márgenes de los caminos, facilitando el tráfico de vehículos antiincendios, así como la recuperación de un buen número de bancales cultivados.

Asimismo, al principio del camino el grupo pasó por un punto donde se ha instalado una toma de agua para abastecer camiones de bomberos y se explicó que queda pendiente la instalación de un depósito de agua que aportará la Sociedad de Propietarios Forestales de Eivissa y cuyo mantenimiento correrá a cargo de la Asociación de Vecinos.

Finalizada la visita, los excursionistas se dispusieron a disfrutar de una torrada de sobrasada en una zona intermedia, antes de descender por los senderos que habían tomado en la subida.

«Nosotros ya trabajábamos por el mantenimiento de este entorno, pero cuando se incendió Morna nos dijimos que no podíamos permitir que sucediera algo así de nuevo y vimos que debíamos hacer algo», afirmó Rafa Tur, tesorero de la asociación vecinal, presidente de la sociedad de propietarios y coordinador de la salida de ayer.

Conscientes de la falta de recursos de las administraciones, la entidad vecinal tomó cartas en el asunto y asumió una serie de mejoras que «aunque no puedan evitar que se produzca un incendio, si nos darán más herramientas para luchar contra las llamas», añadió.

Tur reconoció que «no es usual» que la sociedad civil tome la iniciativa en operaciones de tal calibre, sobre todo teniendo en cuenta que este plan ha supuesto un desembolso de 100.000 euros en los últimos tres años.

Ejemplo a seguir

Sin embargo, se mostró totalmente convencido de que este modelo «se puede extrapolar a otras partes de Eivissa» y que cuando un grupo de personas se implica de manera directa en una causa que supone un beneficio colectivo «tan valioso» pueden tomar conciencia de la importancia de proteger el entorno natural.

«Hay que tener presente que las administraciones no pueden llegar a todo y nosotros hemos llevado adelante un proyecto en el que creíamos y que pensamos que no podía esperar más tiempo», explicó.

Por otro lado, cabe reseñar que buena parte de la inversión que ha realizado la entidad, cerca de un ochenta por ciento, se podrá recuperar gracias a las subvenciones del programa Leader de fondos europeos.

La Asociación de Vecinos des Rafal Trobat fue creada en 2007 y una de las primeras acciones que efectuó fue una limpieza inicial del monte en la sierra de sa Murta, en la cual recogieron unas 30 toneladas de residuos.

Esa campaña fue toda una declaración de intenciones de la entidad, que ha desembocado en la redacción y puesta en marcha del Plan de Defensa Forestal presentado ayer.