Responsables del Consistorio y de UTE Es Vedrà, junto al nuevo camión y los contenedores de recogida. Foto: R.J.P.

La unión de empresas UTE Es Vedrà –formada por Herbusa, Fomento de Construcciones y Contratas y Ferrovial– se hará cargo durante los 10 próximos años del servicios de recogida de residuos en el municipio de Sant Josep. La adjudicación aprobada el pasado 2 de octubre, que asciende a 3,8 millones de euros anuales –un 3% menos que el anterior contrato, según indicaron–, entrará en funcionamiento el próximo 1 de mayo y prevé duplicar los puntos de recogida selectiva de residuos (de los 130 actuales a 244) antes del inicio de la temporada turística. También centrará sus esfuerzos en la limpieza de las playas y en la gestión sostenible de la posidonia.

La alcaldesa de Sant Josep, Neus Marí, incidió durante la presentación en la necesidad de «reducir el impacto de los grandes contenedores», algo que se paliará con su sustitución, así como con la instalación de 15 islas de contenedores soterrados repartidos por el municipio.

El representante de UTE Es Vedrà, Toni Ribas, apuntó que habrá una «optimización del espacio público» y que «aumentará la limpieza manual de las playas» con 10 peones en lugar de los seis actuales. Además, avanzó que se llevarán a cabo «campañas específicas para productos singulares», como son los de tipo industrial y los que producen los hoteles y restaurantes del municipio. Asimismo, destacó la introducción de equipos de funcionamiento eléctrico para «minimizar el impacto ambiental», servicios que detallaron el técnico de Medio Ambiente del ayuntamiento, Raúl Luna, y el responsable de proyectos de Herbusa, Diego Godoy. Una de las grandes apuestas será mejorar la imagen visual del municipio con una reducción del 50% en el número de contenedores antiguos para incrementar las unidades de los ‘Easy City’ de recogida selectiva de gran capacidad. También se optimizará el servicio con la implantación de nuevas tecnologías –GPS– para el seguimiento de la flota.

Por otro lado, los servicios de limpieza viaria contarán con dos barredoras, un equipo de baldeo, 12 ciclomotores (nueve de ellos eléctricos), tres furgonetas eléctricas y cuatro sopladores eléctricos. Con ello se pretende «aumentar las frecuencias de limpieza y la calidad de la misma», señalaron.