Imagen de archivo de la fachada de la residencia de ancianos de Can Blai, en Santa Eulària.

Desde la Conselleria de Família i Benestar Social del Govern balear confirmaron ayer que la residencia de Can Blai no tiene médico. El único que trabajaba en este geriátrico se despidió la semana pasada porque no estaba conforme con las condiciones laborales, ya que, al parecer, el contrato es de dos horas y media diarias. De hecho, este fin de semana murió una mujer y tuvo que ser un facultativo del Centro Médico de Santa Eulària quien certificara el fallecimiento.

Garantías

Desde la Conselleria insistieron en que, a pesar de lo que supone el hecho de que una residencia de ancianos no cuente con un doctor en medicina, «la atención médica está garantizada». Según la Conselleria, el médico de la residencia de Sant Jordi, los del servicio del 061 o los del Centro Médico de Santa Eulària se encargarán de atender cualquier necesidad, como de hecho ya ocurrió este pasado fin de semana.

También anunciaron desde Família i Benestar Social que esta semana, o más tardar la próxima, se contratará un médico para que trabaje de forma permanente en Can Blai.

Esta residencia de ancianos, ubicada en la rotonda de salida de Santa Eulària hacia Sant Carles está gestionada por la Fundació d’Atenció a la Dependència del Govern balear desde el pasado 1 de enero. Hasta entonces, Can Blai era responsabilidad de la Conselleria de Benestar Social del Consell d’Eivissa.