Al hablar de Elsa Punset se acaban las calificaciones. Nacida en Londres, esta escritora y divulgadora de la inteligencia emocional como herramienta para el cambio positivo, es licenciada en Filosofía y Letras, Máster en Humanidades por la Universidad de Oxford, en Periodismo por la Autónoma de Madrid y en Educación Secundaria por la Camilo José Cela. Además, es directora de contenidos en el Laboratorio de Aprendizaje Social y Emocional, excolaboradora de programas de televisión y actualmente coordinadora de El mundo en tus manos del espacio Para todos la 2 de TVE. Ha escrito la fábula El León Jardinero y los libros Brujula para Navegantes Emocionales, Inocencia Radical, Una Mochila para el Universo y El Mundo en tus Manos, este último en 2014 e, incluso, tiene tiempo para dar conferencias. Mañana a las 19.00 horas clausura en Can Ventosa el programa Eivissa, espai familiar con su charla gratuita Educar con inteligencia emocional y social.

—¿Qué es la inteligencia emocional y social?
—Es la certeza que tenemos de que las emociones no son algo que podemos reprimir o ignorar. Estamos hechos de emociones y dictan nuestros pensamientos y comportamientos. ¿Qué emociones te rigen? ¿Sabes ponerles nombre y gestionarlas para vivir mejor y contribuir a tu comunidad? Eso es inteligencia emocional y social.

—Siempre habla de ejercitar el cerebro ¿Cómo se hace eso?
—Hasta hace unas décadas no hacíamos ejercicio físico porque no sabíamos que era bueno para el cuerpo y la salud. Luego se empezó a hacer tímidamente y ahora lo tenemos asumido como algo normal. Con respecto a nuestra mente, vamos poco a poco y en los próximos años aprenderemos a entrenar nuestra mente para que duermas mejor, te sientas mejor, te relaciones mejor, tomes mejores decisiones, comprendas lo que te motiva o sepas solucionar mejor los conflictos… Y Eivissa para eso tiene un entorno excepcional.

—Invita a mirar hacia dentro para mejorar nuestro exterior. ¿Por qué?
—Porque todo está relacionado sin barreras entre lo interno y lo externo. La relación entre cuerpo y mente se está estudiando desde hace años y sin duda va a transformar nuestra manera de entender la salud. Sabemos por ejemplo que las emociones negativas continuadas desencadenan una cadena reactiva química negativa en el cuerpo.

—¿Y cómo eliminarlas?
—Por ejemplo ahora mismo. Cierra los ojos e imagina unos segundos que estás enfadado o asustado. O bien recrea en tu mente una situación que te causa malestar emocional. Tu cuerpo va a generar las hormonas del estrés – cortisol y adrenalina – que preparan tu cuerpo para luchar o huir contra aquello que lo causa. ¿Sientes la tensión involuntaria que acompaña estos pensamientos de ira o de miedo que estás, simplemente, evocando? ¿Sientes que se acelera tu corazón? Da igual que tu estrés sea imaginario o real, ¡tu cuerpo se pone en guardia de la misma manera!

—Pero el estrés gobierna nuestra vida...
—Sí, y el problema es que tu cuerpo no tiene oportunidad para recuperarse y vivimos dentro de un caldo de cultivo perfecto para que se disparen los procesos inflamatorios y se eleve la presión arterial. Aunque esto no causa necesariamente una enfermedad, sí representa un riesgo que afectará negativamente a tu salud, emocional y física.

—¿Y entonces?
—Respira hondo y sonríe. Si calmas el cuerpo y sonríes, aunque no tengas ganas, generas una química beneficiosa para tu cuerpo. Todos los días hay que estirarse, respirar hondo, sonreír y desfruncir el seño. ¡Tu cuerpo y tu mente lo agradecerán!

—¿Y esa gente que vive hundida en un bache permanente?
—Les digo que no tiren la toalla. Nuestro cerebro vira siempre hacia lo negativo, la preocupación y la tristeza, pero podemos entrenarlo en positivo para tener una visión más equilibrada de la vida y llegar a la raíz de nuestra tristeza. Sólo es necesario cuidar cuerpo y mente, entrenarte en positivo, intentar que en tu vida haya más alegrías que tristezas, reír siempre que puedas, y no perder la curiosidad.

—¿Y pedir perdón ayuda? ¿Es algo que se ha perdido?
—No. Es algo que a veces va contra nuestro instinto porque estamos heridos o molestos y nos atrincheramos en las emociones negativas. ¡Pero perdonar empieza por uno mismo! No hace falta que nos digamos que somos fantásticos cuando sabemos que no es así…Sólo es enfrentarse a esa voz crítica que llevamos dentro, y reformularla de forma positiva como lo haría alguien que te quiere.

—¿No cree que la vida ha cambiado con las redes sociales?
—Las redes sociales son un instrumento que nos permite difundir, circular y compartir más información que nunca e intercambiar ideas y unirnos frente a causas comunes… Pero no reemplazan los vínculos íntimos, porque éstos requieren intimidad, cercanía física o emocional. Incluso a veces sirven para agredirnos, porque sin contacto físico no se activa nuestra empatía. Tendremos que aprender a comunicarnos por la red sin dañarnos…