La Federación Hotelera de Ibiza y Formentera (Fehif) ha tomado esta semana la palabra para pronunciarse en asuntos de poderosa actualidad como las previsiones de ocupación para la temporada turística, su preocupación [y la de multitud de trabajadores y veraneantes] ante la oferta de alojamiento ilegal, las competencias en promoción turística para las islas o los inminentes cambios de gobierno en las principales instituciones del Archipiélago. Todos ellos, asuntos que repercuten directamente en el sector servicios, el principal motor de la economía pitiusa.

La Fehif admite que una de sus principales quejas es el escaso «peso político» de Eivissa respecto a Balears y de la propia Comunitat Autònoma respecto al Estado. El presidente de los hoteleros de Eivissa y Formentera, Juanjo Riera, lamenta que el Archipiélago tiene el sambenito de ser considerada «una región rica» aunque en su opinión, «lo que tienen que hacer los políticos es conseguir más fondos para Eivissa y Formentera». «El 90% de nuestras solicitudes coinciden con las de los ciudadanos; un transporte más asequible, los suministros de agua potable y depuración de aguas y ahora, en este in pass, nos encontramos en núcleos turísticos de Vila y Sant Antoni que los espacios públicos dan pena de lo sucios que están y los jardines secos y en mal estado», denuncia. En este sentido, el presidente de los hoteleros pitiusos considera que si persiste la falta de inversión «llegará un momento en que nuestras infraestructuras serán obsoletas y sufriremos un colapso».

Riera también se refirió a la posibilidad de que el futuro gobierno del Consell d’Eivissa recupere el impuesto turístico. «Podemos nos dijo que querían implantar una ecotasa y que no querían permitir el alquiler de pisos en edificios residenciales porque habían encarecido el alquiler en Eivissa. Les dijimos que nosotros estábamos en contra de la ecotasa tras la experiencia del primer pacto del Progreso», admite Riera, quien recuerda que ese impuesto «sólo lo pagaban los clientes que iban a establecimientos turísticos legales; los que iban a hoteles, apartamentos, hostales o pensiones»; es decir, a los reglados, mientras que los que iban a pisos o casas particulares, «o incluso cuando un millonario venía con su yate, no pagaba la ecotasa». La respuesta de Podemos fue estudiar imponer esta tasa «en la entrada a los aeropuertos y puertos». «Les dijimos que esa potestad es del Gobierno de la nación, pero si se implanta la ecotasa, que tengan valentía y que lo hagan en puertos y aeropuertos. Que la pague todo el mundo», manifiesta Riera.

Reivindicaciones

Para el representante de los hoteleros pitiusos, entre las trabas con las que se topa el sector, se encuentran la financiación que recibe Eivissa en materia de promoción turística, por un lado, y el abastecimiento del agua potable y de depuración de aguas, además de la limpieza y el mantenimiento de los espacios públicos de la isla, por otro.

Desde la patronal se muestran muy críticos respecto al porcentaje del ‘pastel’ que irá a parar a las Pitiüses con el traspaso de las competencias de promoción turística, efectivo desde el pasado 1 de junio. «Lo que van a transferir en relación al presupuesto de la conselleria de Turisme i Esports del Govern es una miseria», denuncia el presidente de la patronal hotelera, quien explica que el reparto se realiza a partir de una cantidad fija por isla, de 600.000 euros, más una partida variable en función de la población estacional (con una importancia del 50%), las plazas de alojamiento (30%) y el número de afiliados a la Seguridad Social en el sector servicios (20%). «Por esto me he enfrentado un poco al Consell d’Eivissa, porque lo que no quiero es que nos tomen el pelo. Para 2015, de los 18.700.000 euros que hay para promoción turística en Balears, 4 millones y pico se iban al personal de la ATB (Agencia de Turismo de les Illes Balears) y a su estructura. Luego, entre 8 y 9 millones al Palacio de Congresos de Mallorca, y quedan para repartir entre las cuatro islas 5.300.000 euros. Aunque la partida aumentará un poco cada año, se reducirá la proporción del porcentaje respecto a Mallorca», declara Riera.

De esos 5.300.000 euros para 2015, a la isla de Eivissa le corresponderá el 21% (1.128.811,47 euros) y a Formentera, el 12% (644.135,27). Mallorca manejará el 50% de esa cantidad (2.633.844,54 euros) y Menorca, el 17% (893.208,72).