El búnker donde se instalará el servicio de radioterapia de Can Misses. | (c) Sergio G. Canizares

La inversión de la Clínica Juaneda para la adquisición del acelerador lineal para el tratamiento de la radioterapia en Eivissa ronda entre los cuatro y cinco millones de euros, según confirmó el director general de Juaneda, el doctor Fernando Barturen.

De hecho, Juaneda está pendiente de la firma del contrato. «Tenemos seleccionada la máquina y estamos pendientes de la firma del contrato. No se trata sólo del acelerador ,sino de los inmovilizadores, equipos de medida y el TAC. La inversión está entre los cuatro y cinco millones de euros». Detalló, en este sentido, que el acelerador «es de última generación, las de Son Espases se adquirieron en 2010 y éstas son de 2015. Son más modernas y con más tecnología». Paralelamente, están trabajando en el proyecto de las instalaciones del búnker para remitirlo a la Junta de Seguridad Nuclear, un organismo del Ministerio de Industria.

Proyecto

El proyecto se ha encargado a una empresa de ingeniería especializada en instalaciones nucleares y el doctor Barturen calcula que en un par de semanas estará acabado el proyecto. Aseguró que, a la vista de la documentación aportada que entregada la Conselleria, el recinto está en buenas condiciones. «El búnker cumple con todos los requisitos y necesidades para hacer la instalación», aseguró. Una vez entregado el proyecto a la Junta de Seguridad Nuclear, «si da el visto bueno hay que empezar a hacer la obra», pero ésa no será la única visita, ya que «tendrán que venir a ver la obra, poner la máquina, hacer todas las calibraciones y mediciones, volverá de nuevo la Junta de Seguridad y hacer todas las calibraciones para que finalmente le dé el visto bueno final». Unos pasos imprescindibles que hay que dar debido el tipo de instalación. «En este país están muy reguladas las instalaciones nucleares y para dar cada uno de los pasos tienes que tener el visto bueno de la junta de seguridad nuclear», explicó el responsable de Clínica Juaneda. A finales de febrero se adjudicó la instalación y gestión del servicio de radioterapia oncológica del hospital Can Misses a la UTE formada por la Policlínica Miramar y Juaneda de Mallorca por un presupuesto de 13,6 millones de euros.

Plazo

Una vez firmado el contrato se contempla un plazo de seis meses para ponerla en marcha, «siempre y cuando se cumplan los hitos; mientras la empresa adjudicataria, el Ib-Salut y la Junta Seguridad Nuclear cumplan sus plazos de seis meses, ninguno tiene que tener un sólo retraso, pero si no es en seis será en siete meses» matizó. Barturen reconoció que «ha habido un ligero retraso por parte del Ib-Salut en la entrega de la documentación» aunque recordó que «una instalación de este tipo, además de muy cara, es muy compleja. No hay que asustar a la gente, pero es una instalación nuclear. Los plazos están muy ajustados y se pueden cumplir siempre y cuando no se cometa ningún retraso por ninguna parte. La buena noticia es que ya tenemos toda la documentación y la instalación cumple con todos los requisitos. Estoy seguro que estará antes de final de año».

De hecho, destacó que hasta que no se arranque el servicio, la empresa licitadora no cobrará un euro, «Nosotros somos los primeros interesados en cumplir los plazos», apostilló.