Con la entrada oficial del verano y la cercanía de los meses centrales de temporada, el acceso a la vivienda de alquiler se dificulta con precios aún más desorbitados. La plataforma Ibiza afectados por los alquileresdenuncia que el problema se ha agravado en este mes de junio, pero recuerdan que «la situación está siendo insostenible desde antes de que empezara la temporada», aseguró ayer Luis Gonzaga, uno de los portavoces de esta plataforma ciudadana que cuenta con más de 5.000 seguidores en Facebook.

En páginas de Facebook y en otros portales destinados a la venta o alquiler de viviendas se pueden encontrar ofertas como las que ilustran esta información con una «habitación individual» que en realidad es un colchón en una terraza cubierta por 450 euros más fianza. «Nos ha llegado gente que comenta que les estaban ofreciendo un colchón en el suelo de un salón por 350 euros y a compartir ese salón con otras cuatro personas más durmiendo en colchones, se alquilan balcones cubiertos por un pequeño toldo a 400 euros». A esto hay que sumar la existencia de propietarios que ya tienen alquilado el piso y que instan a sus inquilinos a irse para «darles un uso turístico y alquilarlos a más precio en julio y agosto, o bien gente que ya tiene un piso alquilado y que les quieren subir el precio en los meses centrales de la temporada. La situación ha empeorado bastante. En este último mes nos ha llegado también un caso de un edificio sin acabar por el que se estaban ofreciendo contratos de alquiler, es decir, les ofrecían ser okupas pagando un alquiler que no es válido ni legal».

Por motivos como los expuestos hasta el momento, desde Ibiza afectados por los alquileres animan a seguir denunciando para que, como ha pasado esta semana con la detención de una pareja de estafadores que alquilaba pisos que no existían, las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado puedan actuar: «Animamos a la gente a seguir denunciando, que no se callen y que reclamen. Lo que ha pasado con esta pareja que ha sido detenida, por desgracia no es un caso aislado porque son muchas las personas que hacen lo mismo», concluyó Gonzaga.