El presidente del Consell, Vicent Torres, y los cinco alcaldes de la isla en la reunión mantenida ayer en el edificio de la institución insular. | DE

La segunda reunión del Consell d’Alcaldes de ayer, que era la continuación de la que se celebró el miércoles, sirvió para crear un frente común entre los cinco ayuntamientos y el Consell d’Eivissa para controlar el intrusismo en el transporte terrestre y regular los fondeos masivos en las costas de la isla.

El presidente de la institución insular, Vicent Torres, aseguró que el objetivo es «coordinar al máximo» las diferentes administraciones y cuerpos de seguridad para intensificar los controles sobre los taxis piratas. Torres explicó que trabajarán para establecer medidas de cara a la temporada que viene para ser «más efectivos tanto en labores de vigilancia como de disuasión». Para este verano reconoció que es difícil aplicarlas porque se está acabando, aunque dijo que están poniendo a disposición todos los recursos para evitar «estos abusos».

A propuesta de los alcaldes, también abordarán la protección de las costas para regular los fondeos sobre la posidonia. En este sentido, acordaron coordinar en un futuro acciones para la ordenación de fondeos en los diferentes municipios. El presidente del Consell apuntó que buscarán una fórmula común para regularlos, mientras que la figura jurídica de administración de los fondeos (a través de los ayuntamientos, empresas o vecinos) podrá ser «aleatorio».

En este sentido, el alcalde de Vila, Rafa Ruiz, añadió que la intención es coordinar el trabajo entre todos los municipios para «poner orden en nuestras costas» y evitar que «si se regula en un sitio, los barcos se vayan a otro».

Respecto a la invasión de hamacas en las playas, Vicent Torres dijo que los ayuntamientos controlarán «más y mejor» estas concesiones, aunque también apuntó que no son todas las empresas que abusan de estos espacios.

Por otra parte, Vicent Torres, destacó que se retomará este año el proyecto del centro de baja exigencia de es Gorg, que se inició hace dos legislaturas, y que realizarán un estudio de viabilidad económica y competencial. «Lo primero es mirar si somos competentes y luego miraremos en qué condiciones económicas lo podemos abordar para ponerlo en marcha y mantenerlo», indicó Torres, que recordó que se estableció que el Consell construyera el centro, Vila cediera los terrenos y entre todos los ayuntamientos y el Consell se realizara una gestión mancomunada.