Imagen de los asistentes a las jornadas, con José Vicente Marí Bosó al frente. | Toni Escobar

El Partido Popular ibicenco dio ayer la palabra a sus afiliados y simpatizantes para analizar las causas de los malos resultados obtenidos en las pasadas elecciones y sentar las bases de su nuevo proyecto. En una conferencia celebrada en el Hard Rock Hotel a la que asistieron 124 personas, se desarrolló un debate «enriquecedor», en torno a cuatro grandes bloques: Acción política centrada en las personas, Reforzar la presencia del partido en la sociedad, Democracia interna como centro de la acción política y Nuevas maneras de ejercer la oposición.

El PP ibicenco, según concluyó su presidente, José Vicente Marí Bosó, se plantea como principal reto «recuperar confianzas y complicidades» y «modernizar» sus políticas. «Hay una generación en nuestra isla que ya dirige sus empresas, que ya está en sus despachos profesionales y en sus pequeños comercios, pero que no se acercan a los partidos porque piensan que pierden el tiempo», indicó Marí Bosó, quien considera tarea de la formación «atraer a una gran mayoría de gente que en nuestra isla sigue confiando en unas políticas de centro y reformistas, pero que se ha visto un poco desengañada con las políticas que hemos tenido que hacer esta legislatura». Tras puntualizar que la derrota del PP ibicenco no fue cuestión de «Vicent Serra o de las personas» y sí «de las políticas», reiteró que el objetivo ahora es «atraer a esos profesionales liberales y a esas clases medias que se han ido apartando porque al final piensan que los partidos políticos no son instrumentos útiles para resolver sus problemas».

El presidente del PP ibicenco realizó estas declaraciones en el ecuador de una conferencia que no pudieron seguir los medios de comunicación por petición expresa de sus afiliados.

Marí Bosó apuntó «muchos casos de corrupción que venían de otras legislaturas pero que se han visualizado ahora» como otro de los motivos por los que «muchos de nuestros votantes se quedaron en casa» o que propiciaron «un trasvase de votos» a nuevas formaciones. También reconoció como una causa del retroceso a la «división interna» que se viene evidenciando desde hace años en el partido. «Aquí también se hacen este tipo de reflexiones y no es algo nuevo. Pero un partido lo conforman muchas generaciones que tiene percepciones distintas. Lo importante es poner en común todas estas visiones y formular un proyecto político sólido», subrayó el líder de la formación en Eivissa.

Marí Bosó recordó que el PP realizó durante la pasada legislatura «una buena gestión económica», pero admitió que no han sabido «enamorar» con otras políticas. «Hemos dejado de lado otras políticas y esto debemos tratar de corregirlo», puntualizó.

Al ser preguntado por la democracia interna del partido, Marí Bosó aseguró que el PP no habría gobernado durante tantas legislaturas «siendo un partido inmovilista, sin democracia interna ni debate».

Por último, advirtió de que el PP «no tiene derecho al desánimo» de cara a las próximas elecciones generales y consideró que «no necesariamente» se debe afrontar una renovación de candidaturas. «Cuando convoquen elecciones iniciaremos el proceso para designar nuestros candidatos tanto al Senado como al Congreso, designaciones que también dependen del comité electoral nacional, que es el que aprueba las listas en nuestro partido», concluyó.