La oferta complementaria de la zona de es Canar mostró ayer su preocupación ante la paralización de los viajes del Instituto de Mayores y Servicios Sociales (Imserso), ya que no sabe si en febrero recibirán o no a estos turistas como cada año.

Los comerciantes están pendientes de la confirmación de la venida o no del Imserso en febrero para poder realizar sus pedidos y comunicar a sus trabajadores cuándo les van a poder contratar. «Nosotros empezamos a trabajar a mitad de febrero, que es cuando abren los hoteles para recibir a la gente del Imserso, hasta finales de octubre», explicó María Catalina Marí, una de las encargadas de uno de los comercios Art de es Canar. Su jefe, Jaume Marí Costa, encargado de todas las tiendas Art de la zona confirmó que si en febrero no vienen los turistas del Imserso esto repercutirá en las contrataciones: «Ahora no nos afecta aún, pero en febrero sí, normalmente abrimos a mitad de febrero pero si no hay Imserso tendremos que abrir en mayo, esto reducirá los contratos, que se acortarán dos meses y medio», explicó, «de hecho, nosotros tenemos un total de nueve tiendas de souvenirs Art en el municipio de Santa Eulària y de éstas, seis podrían verse afectadas por esto, con cambios para unos siete u ocho trabajadores de nuestro equipo», aseguró Marí.
Otro comercio afectado es el Estanco de es Canar, allí los pedidos de momento se han paralizado a la espera de saber cómo se resuelve la situación: «Tengo parados los pedidos de febrero, si no vienen los turistas de la tercera edad tendré que decir que me traigan el producto en mayo», indicó Virginia Boned, encargada del establecimiento, «además, estoy a la espera de comunicarle a una trabajadora cuándo va a poder empezar, y ella está pendiente de mí para irse de viaje o no», lamentó Boned. Una situación muy incómoda y que crea incertidumbre entre los trabajadores de la oferta complementaria, que no saben si sus contratos se van a ver reducidos. En el caso del Estanco de es Canar serían dos trabajadoras las que podrían verse afectadas con una reducción de contrato y de jornada.
De momento, lo único que se sabe es que los viajeros pensionistas que debían llegar ahora ya no llegarán. Pero ahora la incertidumbre se traslada para después de fin de año, ya que tampoco hay nada cerrado, «mi madre ha intentado comprar, como cada año, un viaje del Imserso a Benidorm y no ha podido, cuando en esta época ya lo tenía todo contratado», explicó Virginia Boned.

Lo único que es cierto es que los problemas en el proceso de adjudicación ya han provocado el retraso de la llegada de 40.000 turistas a Eivissa hasta febrero y que el conflicto sigue sin estar resuelto. Hasta que no se resuelva la adjudicación, el Imserso no puede remitir tres millones de cartas a todos los beneficiarios del programa, ya que no hay fecha de inicio de venta. Todas estas circunstancias provocan que los primeros turistas del Imserso, si es que al final llegan, lo hagan a partir del mes de febrero, por lo que el programa se acortará más de tres meses.

Ahora ya no solo los hoteles y establecimientos de oferta complementaria que recibían a estos turistas en octubre se van a ver perjudicados por esto, sino que ahora la preocupación aumenta ante la incertidumbre de si en febrero llegará este turismo que permite ampliar la temporada unos dos meses antes del verano.