Ayer las matanzas salieron a las calles de Santa Eulària. Con motivo de la cuarta edición de las Jornadas Gastronómicas del Cerdo, los 11 restaurantes participan compraron un cerdo de 110 kilos que desmontaron para elaborar productos de matanzas en plena calle de Sant Vicent, en Santa Eulària.

«Estamos haciendo matanzas para celebrar la cuarta edición del menú de matanzas que hacemos 11 restaurantes de Santa Eulària. Estamos haciendo sobrasada, butifarra, frita de cerdo, arroz de matanzas y huesos con col», explicó Vicente Marí Juan, del restaurante Es Pins. En total prepararon 100 raciones de cada plato para una degustación que ofrecieron luego en el paseo de s’Alamera, frente al ayuntamiento por un euros cada plato.

Las Jornadas Gastronómicas del Cerdo empezaron ayer y se alargarán hasta el 18 de diciembre, de lunes a viernes durante la comida y la cena. Estos menús basados en los productos que ofrece el cerdo cuestan 15 euros, con la bebida a parte.

Vicente Marí, que fue el encargado de amasar la butifarra en plena calle, una masa que lleva «la carne del cerdo que tiene más sangre y grasa, luego se le pone pimienta negra, nuez moscada, especies, clavo, pimienta roja dulce y picante, y sal. Entonces la butifarra se cuece, sin embargo, la sobrasada es cruda», distinguió Marí y recordó que la sobrasada se hace también con la carne del cerdo y «pimienta roja dulce y picante, sal y pimienta negra y se amasa hasta que ya no se te engancha en las manos».

Luego es el turno de las mujeres que son las encargadas de «llenar los vientres o intestinos de con la pasta que los hombres han amasado.

Dentro de la cocina del Celler de can Pere, su dueño, Paco Tur y otros colegas gastronómicos estuvieron preparando el arroz de matanzas, la frita de cerdo y los huesos con col. «Alli están los huesos a punto de salar y el arroz de matanzas se hace con la carne del cerdo, magro, panceta, pollo, un poco de caldo y un poco de sobrasada y luego cada persona añade lo que quiere como judías o canela, a gusto del consumidor y dependiendo de cada casa», comentó Tur, que también es el cocinero del Celler.

Toda la mañana cocinando

Toda la mañana cocinando una cerdo de raza ibicenca de 110 kilos traído de Can Ros y que costean todos los restaurantes que participan en las jornadas. «Nos han traído el cerdo ya muerto de Can Ros, porque por temas sanitarios nosotros no podemos matarlo», indicó Pepe Serra, propietario del restaurante El Rincón de Pepe.

A partir de las 13.00 horas, sacaron todos los platos que estaban cocinando para dar a degustar a los vecinos y que se acercaron hasta la plaza del Ayuntamiento de Santa Eulària. «Es la primera vez que se hace una degustación pública, antes no se daba a degustar, se lo comían entre los trabajadores de los restaurantes, pero este año hemos dado un paso más, queríamos hacer algo diferente para dar a conocer a la gente el menú de matanzas», comentó la regidora Convivencia ciudadana y Promoción del municipio, Carmen Ferrer.