Cuando se aproximan las fechas navideñas, una de las primeras imágenes que nos asaltan son la de abundantes y onerosos ágapes que se repartirán a lo largo de esos días. Mariscos y pescados que esos días encontraremos a precios prohibitivos, excelsos cortes de carne que no entran en el nuestro menú diario, los mejores vinos y cavas. A pesar de la crisis, en Navidad todo el mundo trata de permitirse algunos lujos que descarta el resto del año. Un día es un día.

Pero existen muchas maneras de poner lujo en una mesa, desde adelantar las compras más caras y congelar el género, como hemos visto en estas páginas en las últimas semanas, hasta poner atención en pequeños detalles que, sin tener que costarnos demasiado, aportarán distinción en nuestra mesa.

En el Mercat Nou de Eivissa, la comerciante Mónica Martínez nos sugiere añadir frutos rojos a cualquier plato. «Es un toque que muchos utilizan como decoración», comenta la responsable de Frutas Maria Cardona. En su puesto comercializa pequeñas bandejas de moras, arándanos, fresas, fisalis, fresas y frutos similares, cuyo precio es de solo cuatro euros. También cita las grosellas, de las que ayer no le quedaban ninguna bandeja, aunque estas son un poco más caras.

Moras y arándanos, más conocidos por la mayoría, quizás no requieran presentación, aunque los fisalis quizás requieran un capítulo aparte. Se trata de una pequeña baya de color amarillento, de sabor agridulce y de forma y estructura similar a la de un tomate, aunque de dimensiones más reducidas incluso que las de un cherry.

Se utiliza a menudo como arreglo floral puramente decorativo, pero tiene además multitud de usos gastronómicos: puede servirse como postre bañado con chocolate, es útil como decoración de tartas y pasteles y combina muy bien con el queso. Además, también se utiliza para preparar helados, yogurt, glaseados, chutneys y otras salsas para platos de carne.

Las fisalis suelen comercializarse envueltos en su propia hoja, que las cubre y protege, manteniéndose en perfecto estado durante semanas. Asimismo, cabe destacar que su contenido en calorías es realmente bajo y resulta apto para diabéticos.

Por su parte, JoanTorres, de Frutas Catalina, señala que en Navidades se dispara la venta de piñas. «Es un postre muy vistoso y bien recibido por casi todo el mundo», comenta el comerciante ibicenco. Solo se necesita un buen cuchillo y algo de destreza para obtener un excelente postre que corone cualquiera de los banquetes navideños.

Además, admite muchos aderezos y se puede combinar con hierbas ibicencas, licores dulces, helado o con cualquier otra fruta para obtener una digestiva macedonia que ayude a bajar los excesos calóricos de los festines familiares dejando un excelente sabor de boca.

Por otra parte, también cita otras verduras ampliamente demandadas durante las fiestas navideñas, como son las endivias (a 2,40 euros por bandeja) o el patatons (a 1,60 euros/kilo). Directamente relacionado con el año nuevo, repunta la uva (ahora a 3,60 euros/kilo). Sin embargo, aclara que la que se encuentra en estos momentos en los mercados es todavía moscatell, mientras que la que llega en nochevieja pertenece a otra variedad.