Los primeros turistas del programa estatal del Imserso llegaron ayer a Eivissa. Concretamente a la ‘ciudad fantasma’ de Es Canar, donde únicamente ha abierto sus puertas el Azuline Hotel Coral Beach.

Tras la desastrosa gestión en la adjudicación de los lotes vacacionales, que propició la pérdida del primer tramo de visitantes para la isla, entre octubre y noviembre, la ausencia de garantías de ocupación y la falta de información por parte de Mundiplan (adjudicataria de los lotes del Imserso en las islas) mantiene en vilo a media docena de establecimientos hoteleros de los municipios de Santa Eulària y Sant Antoni.

El Coral es, de momento, el único que se ha lanzado a la aventura, convencido de que el prestigio y las puntuaciones que ha alcanzado a lo largo del último lustro garantizarían el trabajo a partir del mes de febrero. Ayer recibieron a los primeros 60 turistas del Imserso, procedentes de Girona y Asturias, y según confirmó el director del hotel, José Luis Tur, confían en llenar durante los próximos días las 255 habitaciones de que dispone. «Esperamos que para finales de esta semana o la que viene llenemos o tengamos una ocupación superior al 85 por ciento», subrayó ayer el máximo responsable del establecimiento que la cadena Azuline tiene en las inmediaciones de Cala Nova.

Oferta complementaria

Sin embargo, los recién llegados se encuentran con una importante carencia de servicios en la localidad ya que la parálisis del Imserso ha afectado especialmente a la oferta complementaria. Los comercios, restaurantes y cafeterías que anteriormente iniciaban la campaña bajo el paraguas de cuatro hoteles y varios miles de jubilados lucen hoy ocultos tras sus verjas con carteles de ‘cerrado’, ‘se alquila’ o ‘se traspasa’.

«De momento no hay intención de abrir y nos afecta que no haya oferta complementaria. El Imserso hace más gasto de lo que la gente se cree», lamenta el director del Coral Beach, quien recuerda cómo en años anteriores Es Canar gozaba a estas alturas de cierto esplendor y, gracias al programa, daba empleo a centenares de trabajadores fijos discontinuos, para quienes estos meses resultan decisivos para sus cotizaciones.

Desde el Azuline Hotel Coral admitieron su preocupación por los costes de este retraso y confían en que la situación se regularice de nuevo a partir de la próxima temporada.

Además, la inquietud se extiende a otros sectores dependientes del turismo, como el de los transportes (taxis, buses y barcos), o el de empresas que organizan excursiones y rutas para los turistas. Según ha podido saber este periódico, en Es Canar no hay previstas nuevas aperturas al menos hasta el mes de marzo, cuando contempla inaugurar la campaña el hotel Panorama. Según las personas consultadas ayer, los hoteles Miami y Ereso no tienen previsto abrir, por lo que decenas de comercios y tiendas de souvenirs no encuentran alicientes para adelantar sus aperturas.

En Santa Eulària, mientras tanto, hoteles con tradición en este tipo de programas vacacionales como el Invisa Hotel La Cala se mantienen a la espera de recibir cifras de comercialización por parte de Mundiplan para abrir o no sus puertas este mes. De hecho, en su página de internet no es posible realizar reservas antes del 1 de mayo. El hotel Tres Torres de la Villa del Río podría comenzar su actividad en las próximas semanas, aunque tampoco se ha podido confirmar este extremo. Lo que sí es seguro es que el sector servicios de la isla perderá alrededor de un millar de trabajadores por el fiasco del Imserso.