Yolanda Ortiz, en el centro de la imagen, ayer con los alumnos de segundo curso de Turisme minutos antes de la entrevista con Periódico de Ibiza y Formentera. | Toni Escobar

La Escola de Turisme de Eivissa celebra este año su medio siglo de existencia y qué mejor regalo que recibir este lunes un premio Ramón Llull del Govern por ser uno de los pilares más importantes en la economía pitiusa. Un reconocimiento que la subdirectora y secretaria académica de este centro educativo, Yolanda Ortiz, conoció por una llamada telefónica del Consell d’Eivissa mientras estaba dando clase. «Imagínate qué felicidad; me hizo muchísima ilusión», explicó Ortiz, quien aseguró que, con motivo del 50 aniversario de esta escuela, se está preparando una programación de actos especiales para este año.

—¿Qué sintió al conocer la noticia y qué supone este reconocimiento para la Escola de Turisme de Eivissa?
—Estamos muy felices e ilusionados por recibir este galardón, que es el reconocimiento a la trayectoria de la escuela, a sus creadores hace 50 años (los hermanos Enrique y Ernesto Ramón Fajarnés) y a toda la gente que ha pasado a lo largo de los años por aquí y que tanto han aportado en todo este caminar y en toda esta trayectoria de muchísimo esfuerzo y muchísima ilusión. El premio es una inyección de motivación y satisfacción que nos hace seguir caminando para nuestros alumnos y para el tejido empresarial de Eivissa y Formentera.

—¿El número de alumnos ha ido creciendo con el paso de los años?
—En la actualidad tenemos cerca de 200 alumnos y la tendencia es que haya cada vez más matriculaciones. Es una carrera que, además de formación turística, te da visión en otras aéreas, como administración de empresas, por ejemplo. A esto hay que sumar el valor añadido de los idiomas. Debo destacar que en muchos casos hay alumnos que ya tienen trabajo incluso antes de acabar la carrera en empresas de todos los sectores porque la formación toca muchas aéreas. En Eivissa y en el resto de la comunidad disponemos de grandes empresas y líderes hoteleros del sector que, además, tienen establecimientos en otros países donde los alumnos pueden hacer las prácticas y quedarse trabajando. Es una carrera con la que enseguida tienen acceso al mercado laboral con puestos de trabajo interesantes. La Escola de Turisme, además, mantiene muy vivo el vínculo con empresarios, hoteleros y otras actividades turísticas y esto facilita el acceso al mercado laboral.

—¿Qué porcentaje de alumnos encuentran trabajo al acabar?
—Estamos sobre un 89% del alumnado que encuentra trabajo. Los empresarios recurren a la Escola de Turisme para ofertar empleo; hay mucha demanda de los empresarios. Tenemos los tablones de anuncios con muchas ofertas de empleo

—Por lo que comenta, los empresarios de Eivissa tienen muy en cuenta la formación y labor de la Escola de Turisme, ¿no?
—Los empresarios son un pilar muy importante para esta escuela, así como lo es el pilar institucional del Consell d’Eivissa y la UIB, a la que estamos adscritos. Como la actividad principal de Eivissa es el turismo evidentemente mantenemos un vínculo muy estrecho con los empresarios. Tienen un especial cariño a la Escola de Turisme que guarda toda la idiosincrasia de Eivissa.

—Cuénteme un poco su trayectoria personal en la Escola de Turisme.
—Llevo más de 20 años dedicándome a la docencia, que es lo más importante para mí. El director académico está en Palma y yo en 2003 empecé siendo directora académica y desde 2007 también soy subdirectora académica y estoy en coordinación con Palma.

—¿En qué ha evolucionado y cambiado la Escola de Turisme?
—Los valores que son básicos y que nos diferencian del resto de universidades se mantienen. Estos valores son el espírutu de compromiso, de cordialidad, implicación y atención a todo al alumnado son características que nos hacen especiales y nuestros valores principales; esta es nuestra cultura de organización. Estos aspectos que he mencionado son los que se mantienen. He de decir que nos vienen a visitar antiguos alumnos y que incluso conocemos ya a nietos de antiguos alumnos. La tradición se mantiene y mantenemos el contacto con antiguos alumnos y he de decir que siempre les intentamos ayudar, incluso ante obstáculos que tienen en la vida. Esto nos hace diferentes al resto de universidades en las que los alumnos solo son un número. La gente que viene de fuera a estudiar aquí nos comenta el buen ambiente de cordialidad, educación y respeto que hay entre alumnos y profesores, en toda la comunidad educativa. Respecto a lo que ha cambiado, a medida que ha evolucionado el sector turístico y la formación en el mismo nos hemos ido adaptando. En el año 2009 implementamos el grado en turismo y superamos el reconocimiento a nivel europeo. Seguiremos trabajando con ilusión.