El senador Santi Marí, entre la vicepresidenta del Consell d’Eivissa, Marta Díaz, y el presidente de la máxima institución, Vicent Torres.

Un retén de la Unidad Militar de Emergencias (UME) formado por seis agentes –dos de ellos oficiales– se instalarán en uno de los antiguos pabellones de sa Coma antes del verano para que ayuden en la lucha contra los incendios. «La UME tendrá aquí un retén y, en una segunda fase, podría tener un destacamento. El retén son cuatro personas más dos oficiales o un oficial más un suboficial con tres vehículos: dos motobombas y un vehículo más pesado», explicó el presidente Vicent Torres tras su encuentro con el senador por las Pitiüses, Santi Marí, que en su primera visita oficial al Consell d’Eivissa también quiso conocer diferentes asuntos de interés para la isla, como la situación de las inversiones hidráulicas o la necesidad de reforzar los cuerpos de seguridad del Estado.

En cuanto al proyecto del retén de la UME en sa Coma, Marí señaló que «esperaba poder tener más efectivos durante la época de mayores incendios forestales. Me ha dicho (Vicent Torres) que se continuará trabajando para tener un pabellón más grande y poder tener en un futuro 25 agentes, como yo tenía entendido que el Gobierno central estaba dispuesto a enviarnos, además de diez vehículos. Es un primer paso que hay que valorar». Marí señaló que el compromiso acordado con las distintas administraciones consistía en que el Consell d’Eivissa habilitaba un espacio para la UME y que el Govern balear «pagaba el mobiliario y el Gobierno enviaba los agentes y las autobombas».

El presidente Torres añadió que los agentes de la UME llevarán a cabo «las labores de coordinación inmediata» y que en caso de emergencia «vendría un destacamento en helicóptero. Lo que buscamos es poder apagar los incendios con una actuación rápida».