Centenares de personas participaron ayer en alguna de las actividades que ayer se programaron en diferentes puntos de la isla con motivo del Dia de les Illes Balears.

No solo el acto institucional celebrado al ocaso en el auditorio del edifico polivalente de Cas Serres centró la atención durante el día festivo. Más bien al contrario. Las familias aprovecharon la excelente temperatura de un primero de marzo radiante para acudir, entre otros escenarios, al parque Marià Villangómez de Cas Serres o al hipódromo de Sant Rafel, donde tuvieron lugar distintas actividades relacionadas con el folclore local. También hubo tiempo para las actividades deportivas, con la celebración de la III Olimpiada escolar d’Eivissa en las instalaciones municipales de Can Coix-Sa Pedrera, en Sant Antoni, el Torneig de Petanca disputado en el Passeig Joan Carles I de Vila, o el Campeonato de Balears de las clase optimist y Láser Radial de vela en el club náutico de Santa Eulària.

En cuanto a las actividades lúdicas para niños y mayores, el parque Marià Villangómez de la popular barriada de Cas Serres, en Eivissa, fue el epicentro del programa de actividades elaborado por el Consell d’Eivissa.

La jornada festiva arrancó a mediodía con la celebración de los Jocs autòctons infantils, donde los más pequeños pudieron disfrutar de los juegos y talleres organizados por la Escuela de Tiempo Libre y Animación S´Espurna, con puestos de maquillaje, puntos de libros, mosaicos, instrumentos musicales y una gymkana donde jugar a la gallinita ciega ‘payesa’ (donde el objetivo era romper un pequeño jarrón de cerámica cargado de caramelos y monedas), los bolos o encestar aros sobre conos, entre otros juegos populares. También hubo tiempo para disfrutar con los cuentos de David & Moma o con los sorprendentes trucos del mago Albert.

Entre tanto, los asistentes pudieron disfrutar de ágape y refrescos en la barra ubicada junto al escenario, cuya recaudación irá destinada a la Plataforma Sociosanitaria de las Pitiusas.

La trobada de Glosadors Eivissa-Mallorca (poesía de tradición oral, basada en la improvisación) fue el aperitivo de la Frita de Porc gratuita para 300 comensales que preparó con mimo Serveis Culinaris a partir de 100 kilos de carne de cerdo, 40 kilos de pimientos, 80 kilos de patatas y entre tres y cuatro kilos de ajo.

Ya por la tarde, el taller de contradances, con ball popular a cargo de la colla de Sant Josep y mostra pusieron fin a una serie de actos que contaron con una gran afluencia de público en el parque de Cas Serres.

El hipódromo de Sant Rafel fue el otro punto neurálgico para la tradición ibicenca en el Dia de les Illes Balears.
Desde las doce, el aparcamiento de la (caduca) infraestructura propiedad del Consell Insular fue un hervidero de vehículos, carros y remolques para caballos y ponis. Sinónimo de la excelente asistencia de personas para disfrutar del mercado artesanal, la jornada de trote, el ball pagès de la colla de Buscastell y el arroz de matançes programado a continuación.

En la decena de puestos de manufactura payesa sobresalían los trajes y vestidos típicos de la tradición local junto a emprendadas, anillos y adornos, además de espardeñas de pita, corderas de esparto, el espasí, las flautas de adelfa, las castañuelas de enebro o los tambores. No podían faltar tampoco los elementos realizados en cuero que componen los carros, llamadas guarniciones payesas.

A los actos celebrados en el hipódromo asistieron la vicepresidenta del Consell d’Eivissa Marta Díaz y el conseller popular Vicent Roig. Alrededor de medio millar de personas disfrutaron de la agradable jornada en el recinto de Sant Rafel, donde puso la guinda el cómico mallorquín Agustín ‘el Casta’.