El plato de sopa con el chicle. | facebook

Los profesionales del servicio de cocina del hospital Can Misses confiesan estar «muy afectados» por la aparición de un chicle en el plato de sopa servido a un paciente hospitalizado durante la Semana Santa.

«Es muy fuerte y no entendemos cómo ha pasado. Está todo el mundo muy disgustado», dice una profesional del servicio de cocina. Asegura, en este sentido, que «la gente en cocina trata de que salga todo lo mejor posible». De hecho, afirman que más de una vez se han encontrado con chicles pegados en las bandejas de la comida que vienen de las habitaciones, ayer mismo encontraron goma de mascar en una bandeja del desayuno, pero no entienden «cómo ha podido caer en la olla».

Los propios trabajadores de cocina, a través de la junta de personal, ya alertaron hace unos meses de que el servicio había empeorado tras la apertura del nuevo hospital y reclamaron incluso más personal porque se había ido reduciendo. «Hay poca gente para tanta faena, pero esto no lo explicamos», subrayan.

La Gerencia del Área de Salud de Eivissa y Formentera ha abierto una investigación para aclarar lo sucedido. El gerente del Área de Salud, Josep Balanzat, dijo ayer que «se está hablando con los servicios centrales del Ibsalut» ya que el contrato de la concesionaria es con el Ibsalut.

Balanzat calificó de «lamentable lo que ha sucedido, con la cantidad de profesionales que hay haciendo bien las cosas y que salga esto, me entristece bastante», comentó. Aseguró que se ha hablado en varias ocasiones con la concesionaria. «Estamos encima y seguiremos estando para que el trabajo salga».

El nuevo director de Gestión de Can Misses, Yago Gómez, en una entrevista publicada anteayer en a este medio confesaba su preocupación por servicios no sanitarios, concretamente aludía a los de la cocina y la lavandería, reconociendo que «no se estaba dando el servicio al cien por cien de cómo se debería». Así, por ejemplo, personal de cocina cubre, en fechas puntuales como fines de semana o festivos, las bajas en cafetería. «No estoy contento de cómo están algunos servicios. Hemos de exigir lo pactado y contratado, ni más, ni menos», declaraba el director de Gestión.