El alcalde informó de su situación procesal a los concejales en el pleno de ayer. | DE

El alcalde de Santa Eulària, Vicent Marí, informó ayer a los concejales de la corporación municipal que está siendo investigado por un posible delito de desobediencia a la autoridad. Según explicó Marí, los propietarios de unos terrenos han presentado una querella criminal «porque consideran que hay inactividad municipal en el cumplimiento de una sentencia relativa al pago de unos terrenos expropiados en la calle Ricardo Curtoys Gotarredona por unas obras para dotar de aceras y servicios de abastecimiento y saneamiento de agua».

Durante el proceso en el que se debía determinar el justiprecio de las expropiaciones, esos particulares ya presentaron un contencioso-administrativo que se resolvió en agosto de 2014. El auto instaba al Ayuntamiento de Santa Eulària a continuar con el procedimiento de expropiación, un expediente que todavía continúa abierto. «Es una estrategia clara de presión para intentar conseguir sus objetivos; el Ayuntamiento está haciendo lo que tiene hacer y siempre defenderá el interés general, no el de los particulares, que pretenden cobrar por un terreno un precio que consideramos inaceptable», señaló Vicent Marí, quien afirmó estar «muy tranquilo» al ir «con la cabeza bien alta porque estoy defendientdo los intereses de los ciudadanos de Santa Eulària».

El alcalde del municipio criticó que estos propietarios hayan acudido a la vía penal «cuando tienen otras, como instar al juez a la ejecución de la sentencia o venir a mirar el expediente al Ayuntamiento, que ni siquiera lo han revisado».

Vicent Marí se mostró extrañado por el motivo de su investigación. «¿Desobediencia a quién? Porque cuando el Ayuntamiento recibió la sentencia del contencioso-administrativo que nos obligaba a continuar con la tramitación del expediente de expropiación, lo reactivamos, por lo que estamos cumpliendo con lo que marcaba la sentencia», aseguró Marí. El alcalde explicó que tras la primera sentencia de 2014, «se comunicó a los afectados que como el mutuo acuerdo no era viable por las gran diferencias de precio entre lo que pedían y lo que el Ayuntamiento valoraba, se les pidió que presentaran la hoja de aprecio con su valoración». Vicent Marí explicó que la diferencia entre lo que piden los propietarios y la valoración del Ayuntamiento «es de uno a diez».

En todo caso, el alcalde aseguró que «nos opondremos a este auto, pediremos su archivo porque en ningún caso se ha desobedecido a ninguna autoridad». Vicent Marí está citado a declarar el próximo mes de junio.