A esta licenciada en Ciencias de la Educación le ha tocado el ‘marrón’ de redactar el nuevo planeamiento urbanístico de la ciudad de Eivissa después de que el año pasado el Tribunal Supremo anulara el PGOU de 2009 por un defecto de forma. Elena López Bonet (Eivissa, 1977) rechazó días atrás una silla en el Govern balear para continuar con su trabajo en la ciudad de Eivissa.

— Si hoy una persona presenta un proyecto urbanístico, ¿qué plan se le aplicará?
— El día que se publique en el BOIB, que esperamos sea en una semana, habrá 45 días hábiles de alegaciones y luego se darán licencias a los proyectos que cumplan con los planeamientos de 1987 y 2016. Esto será así hasta la aprobación definitiva.

— En el equipo de gobierno dicen que la aprobación definitiva del nuevo PGOU puede estar lista en un año y medio pero la oposición cree que tardarán mucho más tiempo.
— Decimos un año y medio porque dependemos de otras instituciones que nos han dicho esta previsión basada en un plan de trabajo. No es lo mismo un plan general nuevo que uno, como éste, que ya tiene un trabajo previo. Lo que llevamos a aprobación inicial ya lo hemos comentado con la Comisión balear de Medio Ambiente y con el Consell d’Eivissa. El PGOU de 2009 se anuló porque la Comisión de Medio Ambiente decidió que no era necesario presentar una Evaluación Estratégica Ambiental y, al poco tiempo de tomar posesión, fuimos a hablar con ellos para que no quedara ningún hilo colgando y se comprometieron a darle máxima prioridad cuando este plan les llegue.

— ¿Por qué el PP dice que la ciudad quedará paralizada? ¿Hay mucha diferencia entre el plan del 87?
— El plan del 87 es completamente desarrollista y no contemplaba espacios verdes, ni dotación para escuelas u hospitales. Hay una gran diferencia. No estoy nada de acuerdo con este miedo a que esté paralizada. En Eivissa se está haciendo mucho trabajo de rehabilitación y reformas, el interés de este partido (el PP) va más dirigido a la construcción y a quién la hace que no al interés general.

— ¿Por qué es mejor este PGOU que el de 2009?
— Por tres cuestiones que son los puntales del Plan General. La primera, la movilidad. Si el anterior ya era bueno, éste la mejora porque contempla más espacios peatonales yse interviene en la costa para dar viabilidad a circuitos e itinerarios para peatones y ciclistas. También se potencian espacios verdes, se refuerza la protección del suelo rústico y, sobre todo, apostamos fuerte por la vivienda protegida y el alquiler

— ¿Cómo se explica que haya más unidades de actuación y el techo poblacional se haya reduido?
— Porque no todas estas unidades de actuación están vinculadas a la construcción de viviendas sino a dar mayor movilidad a polígonos industriales como el de Can Bufí o Puig d’en Valls, que los tenemos muy desordenados. En Talamanca hay una calle que acaba sin salida, el Plan General ofrece soluciones y lo hemos aprovechado para mejorar el de 2009. También hemos rebajado el techo de edificabilidad, por lo que el poblacional también ha bajado. Otra explicación son los ajustes legales. La LOUS apura mucho más la realidad del censo de población. Todo esto hace que baje este techo poblacional.

— ¿Qué implica la reducción de 92.000 a 77.000 personas el techo poblacional?
— El techo poblacional es un cálculo de máximos. No es que aspiremos a llegar a 77.000 personas, sino que en el caso de derrumbar todo lo construido, si lo volviéramos a reconstruir y suponiendo que todas las viviendas estuviesen ocupadas, como mucho cabríamos 77.000 personas. Pero esto nunca pasará. Nunca es una aspiración, sino un cálculo de máximos.

— ¿Cuántos metros de suelo urbano quedan por desarrollar?
— Muy pocos, casi tres hectáreas en la zona de Ca n’Escandell y Cas Mut. De la E-20 hacia arriba es prácticamente todo suelo protegido.

— El PP asegura que la rebaja del techo poblacional conllevará un incremento del precio de la vivienda. ¿Están de acuerdo?
— No, para nada. Con nuestra política de vivienda protegida lo estamos atacando. Precisamente quien hizo que el precio de la vivienda se disparara fue el PP con su política de liberación del suelo, parece que se les ha olvidado. Ellos sufren por sus amigos o simpatizantes, que probablemente son más pro construcción, mientras que nosotros pensamos en el municipio que tenemos, en el poco espacio que queda y en no liberar más espacio para construir.

— ¿Cuáles son estas nuevas unidades de actuación y con qué criterios se ha decidido su inclusión?
— El criterio principal es de reorganización y movilidad. La nueva de Talamanca está muy vinculada al Plan Especial de ses Feixes del Prat de ses Monges, que dice que se tiene que habilitar una zona más de aparcamiento y espacio libre delante de la costa, además de dotar de una cierta edificabilidad a los vecinos. Una nueva unidad de actuación está en la parte alta de Ca n’Escandell que se desarrolló sin ningún tipo de criterio urbanístico, con calles sin salida. Allí ganamos un equipamiento y damos salida a las calles hacia la avenida de Sant Josep. Las otras unidades están en polígonos y la que une Can Cantó con Ca n’Escandell, donde se abre una nueva calle.

— Ya habéis explicado que en nueva vivienda se tendrá que reservar un 30% para vivienda social y de ésta, la mitad será en régimen de alquiler. ¿Por qué hacen falta 1.500 viviendas sociales en Vila?
— Es evidente la grave situación en la ciudad y en toda la isla en cuestión de vivienda. Hay gente que no puede venir a trabajar porque no encuentra dónde vivir. En los últimos años no se ha hecho política de vivienda en el municipio, nos hemos encontrado con las mismas que dejó el anterior equipo de gobierno progresista. Se suponía que no se podían vender y que el Ayuntamiento no tenía hacer de inmobiliaria y nosotros en seis meses las hemos vendido y adjudicado a gente que necesitaba una vivienda. La novedad de este plan es que apostamos por un 30% cuando la ley te marca un 10%. Y todavía podríamos aumentar este porcentaje hasta que se apruebe definitivamente. Somos pioneros porque en Balears no hay ningún otro municipio que elabore un Plan General con esta normativa y estamos trabajando de la mano con el Ibavi y la Conselleria d’Habitatge, que creen que estamos llevando a cabo un muy buen trabajo.

— ¿Quién construirá estas viviendas de protección oficial? ¿Imvisa?
— Hay que diferenciar las viviendas que se harán por iniciativa privada, en las que obligaremos al promotor a hacer este 30% de viviendas protegidas. Tendremos que ver cómo se desarrolla y quién hace el seguimiento. Por ejemplo, en Ca n’Escandell el Plan General nos dice que aquí se hará un parque y viviendas. Cómo se tiene que hacer vendrá después, mediante un plan parcial en este caso o en las unidades de actuación con un proyecto de urbanización.

— ¿Qué tienen pensado para que la gente vuelva a vivir en el casco histórica?
— Un caso claro es sa Penya, donde la primera medida será sacar a la gente que vive en unas viviendas del Ayuntamiento, que las tendremos que rehacer y serán viviendas de protección. Después potenciaremos la rehabilitación y la inspección de edificios, que empezaremos por la parte alta. Desde hace tiempo también estamos subastando viviendas cuyos propietarios no se hacen cargo de ellas.

— ¿Cómo quieren que sean ses Feixes des Prat de Vila en en futuro?
— Ya hemos cuantificado cuánto nos costaría expropiar estas feixes aunque ojalá podamos llegar a un acuerdo con los propietarios y recuperar este pulmón verde. Por esto nos hemos marcado hacerlo en el primer cuatrienio de actuación del Plan General. Queremos hacer un plan especial, como se ha hecho en el Prat de ses Monges, que diga qué se hace con el circuito de agua y la gente pueda disfrutarlas paseando por ellas y recuperar el valor patrimonial.

— ¿Cuánto costaría la expropiación?
— Unos 3,5 millones de euros. Ya hemos hablado con otras administraciones como el Consell y el Govern, que están dispuestos a participar en la financiación.

— Las últimas manifestaciones de los propietarios decían que querrían desarrollar urbanísticamente parte de esta zona. ¿Lo contemplan?
— No, evidentemente.

— ¿Qué margen de negociación hay?
— Es complicado, es una situación histórica que todos conocemos. Nosotros no queremos afrontarlo como una guerra sino como una mesa de entendimiento y encontrar un punto para poder hacer este parque sin hacernos daño y avanzar, porque esta zona vive en una situación de stand by desde hace bastantes años.

— ¿Y en Puig des Molins y es Soto se prevé alguna construcción?
— El Plan incorpora las recomendaciones el Consell por las que se tenía que recuperar el valor paisajístico. Hay una actuación puntual en la calle Lucio Oculacio con Ramón Muntaner para hacer un vial y un mirador, cuantificado en 600.000 euros.

— ¿Hay algún cambio en infraestructuras sanitarias, deportivas o educativas?
— Se mantienen todas. Educativas tenemos la de es Pratet, la de Platja d’en Bossa y tenemos un nuevo equipamiento en Can Sant que ya decidiremos a qué lo destinamos.

— En movilidad, ¿qué tienen pensado para que no entren tantos coches en la ciudad?
— A partir de este octubre aumentaremos la peatonalización del núcleo histórico y tiraremos por el Eixample por las calles Extremadura, Madrid ... hasta el Parc de la Pau. Con la apertura del Cetis ganaremos mucho con el transporte urbano e interurbano, potenciar los aparcamientos disuarios y hay que hacer pedagogía para que no queramos aparcar en la puerta. Somos 50.000 residentes pero cada día recibimos 20.000 personas que no lo son por ser la capital. Y cuando el Consell nos ceda la E-10 ganaremos más aceras, carriles bici y aparcamientos. Además del paseo que queremos hacer de punta a punta del municipio para poder transitar por toda nuestra costa.

— Vila no se salva de la plaga de vallas de publicidad. ¿Serán legales?
— No, sólo se permitirá publicidad en polígonos industriales y una por parcela sin ser colindantes. Nunca en suelos rústicos y urbanos. La situación actual no es la que queremos y con la aprobación inicial del Plan General se nos abren otras alternativas para seguir atacando. Queremos que desaparezcan.

— ¿Cómo está la redacción del nuevo emisario de Talamanca?
— Seguimos apretando para que declaren la emergencia de las obras. Desde la concejalía de Medio Ambiente y Alcaldía hay comunicaciones constantes para ver cómo está el proyecto, pero no hay novedades.

— ¿Por qué se tarda tanto en declarar la emergencia o la urgencia?
— Habría que preguntárselo a los servicios jurídicos de la Conselleria de Medi Ambient. Se está trabajando mucho en la depuradora para que lo que llegue al mar no sea tan sucio. Es un tema que nos preocupa bastante.

— ¿Ya estará hecha la depuradora nueva cuando se pueda desarrollar el nuevo PGOU?
— Creo que iremos muy de la mano, quizás incluso acabaremos nosotros antes, aunque el PP no se lo crea.

— ¿Por qué renunció a una conselleria del Govern balear?
— Este proyecto es muy motivador, tenemos una idea de ciudad muy clara y ahora empezamos a poder disfrutarla. Somos un equipo de gobierno con muchas ganas y con gente muy motivada y preparada. Tenemos buena sintonía con Guanyem y es un proyecto que me emociona y tengo ganas de ver los resultados. Soy una persona muy comprometida, no es una cuestión de no asumir responsabilidades, pero no era el momento. Pilar Costa creo que es la persona que mejor nos puede representar en el Govern. Un placer y un orgullo la propuesta pero ahora estoy muy a gusto en esta casa.