La publicación de la aprobación inicial del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de Vila en el Butlletí Oficial de les Illes Balears (BOIB) abre la posibilidad de dar luz verde a determinadas licencias de obras en el municipio, suspendidas tras la decisión del Tribunal Supremo de anular el anterior planeamiento de 2009.

Según señala el BOIB del 21 de abril, se levantará la suspensión de las licencias y autorizaciones previas que se lleven a cabo en los ámbitos de los Plans Especials de Protecció i Reforma Interior (Pepri) de sa Penya, la Marina, Vara de Rey y Dalt Vila-es Soto siempre que sean compatibles con las indicaciones del nuevo planeamiento inicialmente aprobado.

También podrán ejecutarse los proyectos de edificación o urbanización de iniciativa e interés público, así como las licencias previas en establecimientos turísticos existentes «siempre y cuando las obras de modernización no supongan un aumento de la altura máxima y número de plantas».

Prohibiciones de obra

Para el resto de permisos de obra, se suspende la tramitación y otorgamiento de licencias para edificaciones que supongan «un incremento de volumen, ocupación, altura, edificabilidad e intensidad del uso residencial». No obstante, también en este caso se levanta la suspensión para los casos que se basen en el régimen vigente, el PGOU de 1987, y sean al mismo tiempo compatibles con el nuevo planeamiento.

Esta prohibición se aplicará también a los inmuebles que tengan una protección patrimonial aunque sí que estará permitido hacer obras de mantenimiento y de conservación.

Todas las licencias que no cumplan con los requisitos seguirán suspendidas durante dos años o hasta la aprobación provisional del PGOU en sesión plenaria del ayuntamiento, que previsiblemente no se producirá antes de un año.

La tramitación del PGOU

La nueva ordenación urbanística deberá estar expuesta públicamente durante un periodo de 45 días en los que el expediente quedará a disposición de cualquier persona que lo quiera examinar para presentar las alegaciones que considere convenientes.

A partir de ese momento, el Ayuntamiento de Eivissa tendrá un mes para la inclusión de enmiendas y mejoras. Posteriormente, el nuevo plan se enviará a la Comissió Balear de Medi Ambient cuya respuesta se recibirá previsiblemente en unos seis meses, tras los cuales se tendrán que introducir las prescripciones y obtener la Declaración Ambiental Estratégica.

Superadas estas fases, el nuevo PGOU se aprobará provisionalmente de nuevo por el pleno del consistorio, se expondrá públicamente en el caso de que haya cambios sustanciales y, finalmente, será el Consell d’Eivissa el que dé el visto bueno definitivo documento. Una aprobación que, según asegura la concejala de Territori y Vies Públiques, Elena López, podría tener lugar en el plazo de un año y medio.

Durante el plazo de exposición pública, el expediente podrá consultarse en las oficinas del departamento municipal de Urbanisme, en la Plaza de Espanya, 1, de lunes a viernes de 10 a 14 horas o en la web municipal www.eivissa.es.