Hortalizas de invierno y otras más veraniegas conviven en los puestos de los mercados pitiusos. Foto: D. MANAU

Tras un invierno atípico, sin prácticamente lluvias y con temperaturas anormalmente altas, la imprevisible primavera ha empezado con las grandes dosis de locura que la caracterizan. Un guión cambiante que nos depara una nueva aventura diaria sin aviso previo. Así, tenemos unos días que lucen radiantes, en los que el cuerpo nos pide ensaladas y las frutas propias de la época. Otros, en cambio, despertamos bajo un denso manto de nubarrones que ocasionalmente culminan en alguna tormenta y una pronunciada bajada del termómetro que nos invita a entregarnos a una crema o un buen caldo caliente al llegar a casa para cenar. Pasamos de una manga a dos –o tres– y eso se nota también en la mesa y, por tanto, también en nuestra cesta de la compra.

Asimismo, esta situación de cambio constante se traslada en nuestros mercados al género que muestran los estantes de los puestos de frutas y verduras. Por un lado, permanece casi inalterable el reinado invernal de las espinacas, las coles y el brócoli (2,60 euros/kilo), mientras que aparecen los primeros tomates (2,20 euros/kilo) y nísperos (entre 2 y 4,80 euros/kilo) de cultivo local y las primeras ciruelas (4,20 euros/kilo), albaricoques y fresones (de 2,90 a 3,50 euros/kilo), éstos últimos aún de importación, síntomas todos ellos de una primavera que ya ha cumplido su primer mes.

Pero, ya saben: hasta el 40 de mayo... un dicho que nos recomienda no olvidarnos de los ingredientes estrella de los caldos vegetales. Hablamos de los puerros, las chiribías y los nabos, que encontramos todos ellos a precios que rondan los 2,80 a los euros/kilo. A su vez, las zanahorias, que aportan vitaminas además de endulzar ligeramente cualquier guiso, resultan más económicas: las encontramos a 1’20 euros/kilo.

En Frutas y Verduras Toni, José Manuel nos señala que la raíz de apio (2,95 euros/kilo), de aspecto parecido al nabo pero más grande y de forma esférica, aporta mucho sabor a a los caldos. A su vez, Mónica Martínez, de Frutas Maria Cardona, nos recomienda el hinojo (3,40 euros/kilo). «Es un gran multiusos, ya que puede añadirse en ensaladas, caldos o incluso infusiones», comenta la comerciante, quien añade que «en los platos de pescado da un toque muy bueno y los italianos también lo preparan al horno».

Por su parte, Josefa Palau, del puesto homónimo del Mercat Nou de Vila, explica que en esta época del año «los caldos no han bajado, a quien le gustan si hace un poco más de calor lo dejan enfriar un poco y está igual de rico». Sí que confiesa que poco a poco cada día le piden hortalizas más veraniegas. Precisamente, interrumpe sus explicaciones para atender a un cliente que se acaba llevando una lechuga y tomates para prepararse una ensalada. La mayoría de las lechugas cuestan entre 1,20 y 1,50 euros/unidad, aunque alguna clase, como la trocadero, valorada por la suavidad de sus hojas, puede alcanzar los 1’80 euros.

En cuanto a tomates, afirma que «hay para todos los gustos». Desde el tomate de rama al cherry, pasando por el raf (3,65 euros/kilo) o el tomate ibicenco de ensalada (1,95 euros/kilo). Sobre éste último, José Manuel, de Frutas Toni, explica que la variedad local más común, denominada Daniela, (2,20 euros/kilo) empieza ahora su temporada y se convertirá en protagonista en las mesas pitiusas hasta el otoño.