El tercer acto de celebración de los 30 años de la Ley de Normalización Lingüística ha tenido lugar en el Consell d'Eivissa. Foto: ARGUIÑE ESCANDÓN

El Consell de Eivissa ha acogido este miércoles el tercer acto de celebración de los 30 Años de la Ley de Normalización Lingüística, organizado por la Dirección General de Política Lingüística con las ponencias de Noelia Marín, Joan Melià y Montserrat Montés, moderadas por Isidor Marí. Los tres ponentes han expuesto la visión del texto legal desde diferentes perspectivas.

Según han explicado desde el Govern, Noelia Marín, miembro del Colegio de Abogados, ha aportado una visión jurídica, asegurando que desde la Comisión de Normalización Lingüística del Colegio de Abogados se ha empezado a trabajar para incluir el catalán en la documentación oficial, aunque "está todo por hacer".

Marín ha apuntado que el uso "casi nulo" del catalán en el ámbito jurídico se debe a que las competencias en materia jurídica no están transferidas, sino que dependen directamente del Ministerio de Justicia. Esto provoca, según ha dicho, que los jueces que llegan a las Islas saben que están de paso y no se esfuerzan en aprender la lengua del territorio, constatando que el poder judicial obvia el catalán en su ejercicio.

Joan Melià, ex director general de Política Lingüística ha hecho el análisis de cómo se usa la lengua en la Administración, apuntando que, desde su entrada en vigor en 1986, la Ley ha pasado "un proceso ondulante" dentro de este ámbito. Sin embargo, ha asegurado también que es donde "más se ha avanzado" porque "se partía de cero".

Asimismo, ha explicado que el principal problema de la aplicación de la Ley dentro de la Administración han sido los límites a los que se ha querido llegar.

Montserrat Montés, del Institut d'Estudis Eivissencs, ha analizado la Ley desde el punto de vista social. En este ámbito, la ponente ha asegurado que el catalán nos sirve como lengua de cohesión social, especialmente con las personas que llegan de fuera de las Islas.

También ha apuntado que se ha avanzado mucho en ámbitos como la educación, la toponimia o las instituciones, "aunque se está llevando a cabo como contrapartida un proceso de latinización, relegándose el catalán a los ámbitos formales, sin ser empleado como lengua de la calle".

Tras las ponencias se ha hecho un debate sobre el uso de la lengua en los ámbitos que se han analizado.

La consellera de Transparencia, Cultura y Deportes, Ruth Mateu, ha clausurado la jornada, asegurando que "la lengua catalana no es un problema, es una oportunidad y una riqueza que hay que defender y sobre todo hacerla nuestra, en todos sus ámbitos. La mesa redonda de hoy ha sido un claro ejemplo de esta diversidad de ámbitos, desde el jurídico al administrativo, pasando por la sociedad civil", ha dicho.