Un nuevo servicio de calesinos entró en funcionamiento el pasado viernes para transportar personas a lo largo de los andenes del puerto de Vila, una zona peatonal cuyo acceso al tráfico rodado solo está permitido a vecinos y comerciantes en horario de carga y descarga. Este nuevo servicio de transporte, que gestiona una empresa privada, ha sido autorizado por Autoritat Portuària de Balears (APB) y dispone de tres vehículos que se ubican en tres lugares del puerto: junto a la barrera de acceso al puerto, en la zona del Obelisco, y al final de los andenes, junto al muro. El precio por viaje es de 5 euros y solo estará en funcionamiento en las horas en que el acceso al puerto esté prohibido.

La Federación de Comerciantes La Marina-Puerto de Ibiza, junto a la asociación, la Pimeef e Ibiza Magna, consideran que este servicio no es suficiente para atender la demanda y, por ello, han remitido un escrito a APB para que autorice la entrada y salida de algún otro tipo de vehículos para transportar a personas a lo largo del puerto aunque no puedan aparcar. «Están pasando los meses y todavía no nos han dado ninguna solución cuando estamos ya en plena temporada», criticaron desde la federación.

Los comerciantes han pedido también a la institución portuaria que permita la entrada de algunos taxis al menos hasta la zona del Obelisco para poder cargar y descargar personas a cualquier hora del día. Según señalaron, APB debería instalar un dispositivo de lectura de matrículas o que una persona estuviera permanentemente
junto a la barrera para permitir el paso de estos vehículos.

Asimismo, dijeron estar «molestos» porque han visto entrar algunos vehículos privados en el interior del puerto para transportar a pasajeros de una embarcación que está atracada en la parte final de los muelles.