El Consell prosigue con la colocación de trampas de cajón con cebo vivo en diversas zonas de la isla. | R.I.

El Consell d’Eivissa desaconseja introducir especies depredadoras para combatir la plaga de serpientes que está sufriendo la isla. Según el biólogo y técnico de Medio Ambiente, Jaume Estarellas, importar animales de otros hábitats para frenar la proliferación de ofidios, de los que pueden alimentarse, puede llegar a ser contraproducente para la fauna autóctona local, como la población de ‘sargantanes’.

«Lo estuvimos mirando, pero la gestión de especies en terreno insular es muy limitada. Utilizar depredadores que no son de la isla para combatir una plaga puede conllevar efectos mucho peores», alerta Estarellas, quien pone como ejemplo de efectos «no deseables» una plaga de conejos en Australia contra la que se introdujeron zorros europeos: «En vez de comerse los conejos, se comieron marsupiales y koalas. Fueron a por la especie autóctona y los efectos fueron indeseables».

El técnico medioambiental reconoce que se estudió introducir de forma controlada depredadores como el meloncillo y otros mamíferos de regiones fuera de Europa como la mangosta egipcia o el suricato africano, pero concluye en «desaconsejar» esta práctica. «Aunque los trajéramos castrados, si en vez de serpientes se comen lagartijas o fauna autóctona; o un pequeño error de traer una especie no castrada puede suponer otra plaga», subraya el técnico, quien admite que la población de lagartijas en la isla «ha bajado en aquellos lugares donde se han detectado serpientes».

Control de olivos

Para el experto, la única solución eficaz contra la invasión de serpientes en la isla es el control de los olivos infectados y los árboles ornamentales que se introducen en Eivissa. Jaume Estarellas reconoce que «urge tomar medidas» más allá de la colocación estratégica de trampas.

En este sentido, la Conselleria balear de Medi Ambient trabaja con el Cabildo de Canarias y el Ministerio en la búsqueda de fórmulas para controlar la importación desde el sur de la Península de este tipo de árboles, a través de los cuales llegan los ofidios a la isla. Según las estimaciones de los expertos, actualmente la población de serpientes en la isla se cuenta por millares.