Aficionados al mundo del motor y curiosos llegados desde todos los puntos de la isla se dieron cita a lo largo de la jornada de ayer, en el barrio de es Pratet, para disfrutar de la primera Fira de la Moto Clàssica i de Col·lecció des Pratet. Una interesante propuesta lúdica que este año ha debutado con gran éxito dentro del programa de eventos organizados por la Asociación de Vecinos con motivo de las fiestas de Sant Cristòfol.

«Con esta exposición de motocicletas clásicas de fabricación nacional hemos querido reivindicar la importancia que tuvo la industria de las motos en España durante buena parte del siglo XX, hacerle un homenaje a los modelos más significativos de aquellos años y, de paso, realizar un llamamiento para la conservación de ses Feixes, un espacio natural ligado al barrio de es Pratet que pensamos que debe ser protegido por su alto valor ecológico y etnológico», explicó Xavi Suárez, presidente del motoclub Es Pratet Classic Club.

En este sentido, Suárez detalló que la idea de montar este evento para las fiestas del barrio surgió «con la intención de poner dar a conocer también la tradición industrial que va ligada a la historia de es Pratet. Hablamos de un barrio que fue asociado durante muchos años a la fabricación de textiles en Can Ventosa, a los trabajadores del sector energético de la antigua Gesa y a los diferentes talleres de motos ubicados en la zona».

La muestra, compuesta por una treintena de motos de diferentes propietarios (auténticas joyas de coleccionista en perfecto estado de conservación y valoradas hoy día en hasta 7.000 euros), incluyó modelos tremendamente carismáticos que fueron un fiel reflejo de una época dorada en la que destacaban por sus triunfos en las pistas marcas españolas tan míticas como Montesa, Bultaco, Derbi y Ossa, junto a otras italianas como Moto Guzzi o Ducati Mototrans.

«Todas las motos expuestas están en disposición de circular. El público cuenta con una amplia variedad de modelos con cilindradas que van desde los 49 c.c. hasta los 370 c.c. Algunas de estas motos fueron de lo mejor que hubo en su época, fueron las grandes dominadoras y vencedoras en su especialidad en los campeonatos de Europa y del Mundo. Por lo tanto, hablamos de que se pueden ver no solo motos bonitas, sino también algunas de las más victoriosas en los circuitos internacionales, como es el caso de la Bultaco Sherpa», añadió Xavi Suárez.

La buena acogida de la exposición ha hecho que los organizadores hayan avanzado ya su deseo de darle continuidad a esta cita durante los próximos años. A este respecto, el presidente del motoclub señaló que «estas motocicletas, más allá del valor económico que puedan tener, poseen un gran valor histórico y son modelos muy queridos por todos los aficionados. Poder verlas de cerca es todo un espectáculo para ellos».

«Tenemos además algunas curiosidades realmente interesantes, como es el caso de la versión militar de la Bultaco Alpina de 250 y 350 c.c. Las últimas motos de estos modelos que se hicieron en la fábrica de Sant Adrià de Besòs (Barcelona), allá por los años 1978-79, fueron enviadas todas a Eivissa para ser destinadas a las casas de alquiler y a comandas de las Fuerzas del Estado, del Ejército, la Guardia Civil y la Cruz Roja», destacó, finalmente, el representante del Es Pratet Classic Club.