La Asociación Empresarial de Concesionarios de Captaciones de Agua Potable para consumo humano de Ibiza y Formentera ha reiterado que no descartan acudir a los tribunales para combatir los perjuicios que les supondrá la aplicación del decreto de sequía ya que estas empresas, de abril a octubre, no podrán vender agua para no sobreexplotar los acuíferos y durante el resto de meses sólo podrán suministrar en el supuesto de que las desaladoras no cubran la demanda.

Los miembros de la Asociación se han reunido esta semana para valorar sus próximas acciones.

"Esto va para largo y estudiamos lo que se puede hacer con un gabinete de abogados", han avanzado.

"Lamentamos que el decreto está ya aprobado y no nos hicieron caso de nada de lo que habíamos pedido. Se aprobó tal cual y seguimos intentando luchar contra un gigante", ha dicho la vicepresidenta Carmen Torres en declaraciones a Europa Press.

Según ha recordado, el decreto todavía no se aplica puesto que no está en marcha la nueva desaladora de Santa Eulària.

Después, según Torres, "los pozos que vendemos agua a los camiones tendremos que cerrar porque no podremos estar tantos meses sin poder hacer uso de los pozos".

"Para nosotros es una injusticia terrible", ha insistido Torres, quien ha recordado que el decreto aprobado por el Govern afecta a unas 25 empresas de la isla.

"Nos reunimos con todos los ayuntamientos, el presidente del Consell o el conseller de Medio Ambiente del Govern y todos nos prometieron que nos informarían y la siguiente noticia que tuvimos fue que ya estaba aprobado", ha lamentado.

"Teníamos confianza en que antes se pudiera cambiar algo porque en otros sectores hay limitaciones, pero en el nuestro han cortado radicalmente", ha dicho.

Según Torres, "no hicieron caso a ninguna de nuestras alegaciones".

"En la primera, no nos admitieron nada. En otras, tras las reuniones con el Govern, ni nos contestaron porque nos dijeron que estaban fuera de plazo. Nosotros pedíamos que estudiaran más la situación y no nos cortaran la actividad de manera radical porque nos obligan a cerrar empresas", ha concluido.

Según ha recordado, las alrededor de 25 empresas de captación y suministro de agua potable tienen una producción anual cercana a los 600.000 metros cúbicos.