El martes expiraban los cuatro días de suspensión impuestos por la unidad territorial a la que pertenece pero, por el momento, el guardia civil detenido en el marco de la operación ‘Port Torrent’ no ha regresado a su puesto de trabajo, según confirmaron ayer fuentes del Instituto Armado.

El reglamento interno por el que se rige la Guardia Civil refleja que el agente podrá volver a su puesto de trabajo una vez transcurrido esos cuatro días desde el momento en que fue puesto libertad por el juez.

El guardia destinado al puesto de Sant Antoni no ha regresado al cuartel y, según fuentes consultadas, podría no hacerlo de momento ya que se habría acogido a una baja médica.
Paralelamente, el guardia se enfrenta hasta nueve meses de suspensión de servicio por una falta grave. La adopción de este castigo disciplinario debe llegar desde Madrid.
Sanción

Según informaron fuentes del Instituto Armado, la Comandancia de Balears ya ha informado de los hechos a la Dirección General de la Guardia Civil, que es la que decide en última instancia la aplicación de alguna sanción disciplinaria.

Según la Ley Orgánica 12/2007, de 22 de octubre, del régimen disciplinario de la Guardia Civil, si se entiende que los hechos son constitutivos de una falta grave, el guardia se enfrenta a una suspensión de entre uno y tres meses, así como a la pérdida de destino. No obstante, las medidas cautelares se podrían prorrogar dos veces hasta alcanzar los nueves meses.

En el caso de que fuera entendida como una falta muy grave, el artículo 11 del régimen disciplinario recoge una suspensión de empleo de entre tres meses y un día hasta un máximo de seis años, separación del servicio y pérdida de puestos en el escalafón.

Las fuentes de la Guardia Civil consultadas señalaron que el proceso y la investigación está en marcha por lo que hay que esperar a ver cómo evoluciona la situación procesal del guardia detenido y que quedó en libertad con cargos por un delito contra el patrimonio.

Paralelamente, la Guardia Civil continúa con la investigación de la operación ‘Port Torrent’ que se cobró una detención más el lunes, un hombre que quedó en libertad con cargos tras declarar ante el juez.