Las escandalosas cifras que se pagaron por los lotes de playas de Sant Josep (más de 9 millones de euros por dos años), que fueron adjudicados por primera vez mediante subasta, ha generado que buena parte de los concesionarios inflen los precios más allá del máximo autorizado en los pliegos del contrato para la prestación del servicio. En función de los mismos, las hamacas y las sombrillas deben alquilarse a un precio máximo de 10 euros por día y elemento, reducido a la mitad si se adquieren a partir de las 15,30 horas.

Ninguno de los concesionarios consultados cumplía con dichos parámetros. Solo uno de los cuatro lotes, ubicado en la playa de ses Salines, respetaba las tarifas, pero no ofrecía la posibilidad de alquilar elementos para medio día. A pesar de esto, en playas como la de es Migjorn es casi imposible encontrar una hamaca libre a partir de las 11 de la mañana. Por ello, muchos adjudicatarios juegan con las tarifas en función de la disponibilidad. Y hay clientes de sobra como para colgar el cartel de ‘completo’, incluso para reservar elementos para días posteriores, a pesar de no estar permitido.

En uno de los restaurantes más conocidos de la playa situada en el parque natural, el precio por hamaca asciende a 15 euros, cinco más del precio máximo autorizado por el Consistorio, mientras que las sombrillas se alquilan por 10 euros y pueden plantarse fuera de los márgenes acotados este año por el Ayuntamiento mediante cintas naranjas.

Y aunque instalaciones como las camas balinesas están sujetas a autorización expresa por parte del Ayuntamiento, en la práctica la mayoría de concesionarios ofrece estructuras similares compuestas por dos hamacas o varios colchones. Y aprovechan para hinchar los precios. En este mismo concesionario cobran 50 euros por hamacas dobles acompañadas por una sombrilla; y 60 si se alquila con dos parasoles.

«Si venís por la tarde es más barato, depende de la hora. Si está cubierto el día, te lo dejo gratis», indica uno de los responsables del servicio de playas de este lote, quien al ser cuestionado por la existencia de tarifas para medio día, acaba cediendo: «Por la tarde, 30 euros por dos hamacas y sombrilla». Es decir, el precio máximo autorizado en los pliegos del Ayuntamiento para el día entero.

Tampoco se respetan los horarios de servicio, que en las condiciones previstas por el equipo de gobierno de Sant Josep se establecía de 11 a 19 horas. Para ampliarlo, como cita el pliego técnico, se debe pedir autorización expresa al Consistorio y contar con socorrista si se excede el horario del servicio de salvamento de esa playa. En todos los concesionarios consultados se comienzan a montar los elementos de playa a partir de las 08.00 horas y se retiran hacia las 21 horas.

Para ‘guiris’

En un conocido chiringuito situado en la playa de es Cavallet, el precio por hamaca asciende a 20 euros en el tramo más próximo a la orilla. «Es un poco caro. Es para ‘guiris’», admite uno de los trabajadores del servicio al ser cuestionado. Tampoco ofrece la posibilidad de alquilarlo a precio reducido durante media jornada. «No puedo hacer nada porque tengo al jefe detrás. Esta playa es cara, no os compensa coger hamaca por la tarde», confiesa con cierta resignación.

Unos metros más atrás, junto al restaurante, hay habilitado un espacio con una docena de camas balinesas por las que se piden 80 euros y, además, es obligatorio comer. «Las camas grandes de atrás te pueden salir por 500 euros», resopla el mismo trabajador. A pesar de los precios, el establecimiento tenía reservadas –a mediados de semana– todas estas estructuras hasta el próximo 18 de agosto. Este, como otros muchos concesionarios, incumple la condición de mantener visible el poste del Ayuntamiento con el precio máximo autorizado por elemento: 10 euros. Parece razonable. ¿Cómo si no iban a explicar al cliente que le van a cobrar más del doble?