La metamorfosis de la plaza del Parc comenzaba a primera hora de la mañana de ayer, cuando los obreros vallaron la zona donde, en los próximos cuatro meses, trabajarán para cambiar el pavimento y convertir el corazón de Vila en una zona peatonal uniforme desde Vara de Rey hasta las murallas.

Los operarios empezaron a desmontar los elementos en superficie como bancos, papeleras o farolas. También las placas con huellas de las manos de personas destacadas de la ciudad y que ayer los obreros retiraron una a una para evitar que se dañaran.

La mayoría de los bares de la plaza cerraron ayer sus puertas hasta que acaben las obras, dado que el Ayuntamiento de Eivissa les obligaba a retirar las terrazas. Sin embargo, algunos negocios han decidido mantenerse abiertos para cubrir, al menos, los gastos de alquiler del local.

Uno de ellos es el restaurante La Taberna, cuyo propietario, Alejandro Meca, se quejaba de que el Consistorio no ofrezca ninguna compensación a cambio por los perjuicios que les causarán las obras. «Esto supondrá el despido de casi la mitad de la plantilla y la pérdida de clientes, que se irán a otros restaurantes», explicó. Su local se mantendrá abierto, «aunque corremos el riesgo de no ganar los suficiente para pagar los gastos».

Sandra Pérez, empleada de Madagascar, destacó lo «complicado» que es que lleguen clientes a la plaza: «Cuesta mucho venir hasta aquí con el coche y aparcar y luego llegar andando entre tantas obras». Este local es el único de esta parte de la plaza que se mantiene todavía abierto porque, al contrario del resto, tiene un pequeño espacio en el interior para unas pocas mesas y, por este motivo, aguantarán al menos unos días más con la persiana levantada.

La que se está planteando cerrar es la cafetería del Hostal Parque, al menos por las noches. Según cuenta una de sus empleadas, la recaudación del negocio ya se ha visto resentida por las obras de Vara de Rey: «Hemos pasado de hacer cajas diarias de más de mil euros a solo 400». Por este motivo, 15 trabajadores se irán al paro y únicamente dispondrán del personal necesario para mantener el hostal abierto.

LA NOTA

El Ayuntamiento es 'optimista' y afirma que las obras acabarán en febrero

El concejal de Patrimonio de Vila, Pep Tur, se mostró ayer «optimista» sobre la duración de las obras de peatonalización en la plaza del Parc y aseguró que estarán acabadas en febrero. «Es una obra donde hay trabajos que igual se pueden adelantar y otros retrasar pero el objetivo es que, en abril, esté acabado todo el conjunto», es decir, la plaza, el paseo Vara de Rey y la zona junto a la muralla donde se habilitará la nueva plaza Sota Vila, que se unificarán gracias a un mismo pavimento.

En la plaza del Parc, durante los próximos cuatro meses, aparte del cambio de pavimento, también se renovarán infraestructuras de electricidad y gas. «Es una intervención como la de Vara de Rey pero a mucha menos escala», explicó Tur. De hecho, la plaza del Parc está toda a la misma altura, a diferencia de Vara de Rey donde los operarios tienen que igualar la zona del paseo con las antiguas aceras.