El oleaje de las últimas jornadas ha hecho mella en la playa de Talamanca. | DANIEL ESPINOSA

El oleaje registrado en los últimos días ha dejado huella en zonas del litoral y sus efectos eran ayer bien visibles en puntos de Ibiza como la playa de Talamanca, que amaneció cubierta por un gran manto de algas.

El mar se comió buena parte de la arena y en los tramos donde quedaba alguna lengua de playa, la arena estaba completamente cubierta por montañas de algas.

El fuerte oleaje arrastró hasta la orilla y en algunos casos tierra adentro algunas embarcaciones.

El temporal dejó huella a lo largo de todo el paseo y los golpes de mar cubrieron grandes tramos de la pasarela de madera, pero también tuvo efectos en las zonas protegidas. Así, el oleaje causó algunos desperfectos en el mobiliario urbano y arrastró materiales de algunas obras de la zona.

Son los efectos causados por unas jornadas de fuertes vientos de llebeig, que han dejado rachas de hasta 55 kilómetros por hora en Ibiza y Formentera.

De hecho, durante la jornada del miércoles la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) activó la alerta amarilla por fenómenos costeros en las islas de Ibiza y Formentera.

Según informó ayer el portavoz de Salvamento Marítimo, Miguel Chicón, en estos casos deben ser los propietarios de las embarcaciones los que se encarguen de recuperar y retirar los barcos siniestrados por el oleaje.