Viviana de Sans (Podemos) y Vicent Torres (PSOE), frente a frente durante las negociaciones de 2015 que acabaron en un acuerdo de gobierno.

Los socios de gobierno en el Consell Insular d’Eivissa, PSOE y Podemos-Guanyem, han llevado a término 76 de las 144 medidas calendarizadas hasta finales de 2016 en los acuerdos de gobierno, pactados por ambas formaciones tras las elecciones municipales de 2015.

Según se desprende de un estudio elaborado por el grupo Podem-Guanyem en el Consell d’Eivissa, al que ha tenido acceso PERIÓDICO de IBIZA Y FORMENTERA, el equipo de gobierno progresista solo habría ejecutado un 50,7% de las medidas fijadas durante las negociaciones. El informe revela, además, que 62 de las 144 medidas se encuentran en proceso de trámite (un 43%), mientras que nueve de ellas, un 6,25%, no se han llevado a la práctica.

La formación morada dará a conocer a sus inscritos en los próximos días el documento sobre el grado de cumplimiento de los acuerdos de gobernabilidad en el Consell. Sus resultados se debatirán el próximo viernes en la asamblea insular de Podemos Ibiza y, dada la fractura abierta en la formación, la militancia podría exigir a al consejo ciudadano (la directiva, encabezada por Viviana de Sans) una consulta telemática para refrendar o echar abajo la alianza de gobierno.

En el documento, Podem-Guanyem justifica las estadísticas diagnosticadas destacando que en el momento de planificar la calendarización de las medidas pactadas «no éramos plenamente conscientes de algunas circunstancias que sólo se pueden conocer desde dentro de la institución». La formación morada explica que se encontraron un Consell «paralizado, con muy pocos proyectos en marcha después de cuatro años de inoperancia del PP», y con «240 trabajadores menos en la plantilla respecto a 2011» por la aplicación estricta, apuntan, de la Ley Montoro «y la lentitud inherente a la maquinaria administrativa».

Aunque «estas dificultades no deben servir como excusa», advierten los podemitas en el informe, insisten en que tuvieron que dedicar los primeros meses «a reactivar» los diferentes departamentos «optimizando los recursos humanos y poniendo en marcha proyectos y expedientes nuevos, lo que ha retrasado la calendarización prevista inicialmente», señalan. «Resueltos estos inconvenientes –subrayan en el citado documento–, las medidas programadas han empezado a realizarse con fluidez y con un ritmo cada vez mejor».

Lo cierto es que entre las bases de Podemos han surgido voces contrarias a la «institucionalización» y el giro «grouchomarxista» que habría dado la dirección y los cargos públicos del Consell. Este malestar, materializado en renuncias como las de Toni Sánchez-Tirado, Aitor Morrás y, recientemente, José Sánchez Rubiño, se llevará al ruedo de la asamblea ciudadana de la formación el día 17.

LA NOTA

Renuncian al Consorcio de Movilidad y a cambiar el SOIB

De las 144 medidas acordadas por Podemos y PSOE no se han llevado a cabo, muchas de ellas, indica Podem-Guanyem en su diagnóstico, porque son competencia de otras administraciones. Es el caso de intentar controlar la oficina de empleo (SOIB) para reconvertirla en «un servicio integral para la población en edad laboral» y ampliar su cobertura. También renuncian a reactivar el Consorcio de Movilidad «porque el Consell dependería de otras instituciones». Otras de las medidas paralizadas responden a planes urbanísticos y territoriales cuyas competencias no tiene en exclusiva la institución insular.