El Grup d’Estudis de la Natura (GEN-GOB) anunció ayer las alegaciones que ha presentado al proyecto de la pedrera que Grupo Empresas Matutes, según afirman, pretende abrir en una zona protegida de sa Granada (Sant Antoni) «haciéndola pasar por pedrera existente».

El proyecto de esta cantera, recuerdan los ecologistas, «fue expresamente denegado por el Ministerio de Medio Ambiente hace 25 años», con los informes desfavorables de Icona y del propio Govern balear «por las inasumibles repercusiones ambientales que conlleva».

El Govern balear no puede ahora autorizar una cantera de la que informó desfavorablemente en su momento, sostienen, «ya que constituye un caso claro de prevaricación.»

El GEN pedirá explicaciones «de por qué y para quién se ha incluido esta explotación fantasma, formalmente denegada, en el registro de explotaciones mineras de Balears cuando ya se denegó en su momento la inclusión en el Plan de Canteras».

En la primera de las alegaciones sostienen que el expediente en cuestión hace referencia a una cantera inexistente. «Aunque esta supuesta explotación no aparece en el Plan de Canteras, norma donde se recogen todas las canteras existentes, tanto activas como inactivas, de manera repentina e incomprensible aparece, después de la aprobación de la Ley 10/2014 de Minas de las Islas Baleares, en el registro de actividades extractivas, sin que se haya seguido ningún trámite conocido para figurar en este listado y sin que, de hecho, la cantera en cuestión exista sobre el terreno», explica el GEN en un comunicado.

«Las únicas extracciones realizadas en la zona son las que se encuentran en toda la isla, para usos tradicionales en la misma zona: construcción de paredes de bancal, hornos de cal, etc, pero de ninguna manera puede considerarse que se trata de una cantera existente», subraya la organización.

El GEN también apunta en sus enmiendas que la zona se encuentra incluida en el ANEI de Serra Grossa y forma parte de la Red Natura 2000 en cumplimiento de la Directiva de Hábitats. Además, sostienen que la posibilidad de abrir una cantera en la zona «ya ha sido objeto de dictamen ambiental desfavorable, firme e inapelable».