Lola Penín Jardón.

Todo empezó con una recogida de firmas en change.org y un grupo de whatsapp al comienzo del curso escolar. Meses más tarde se constituyeron como asociación y la semana pasada se presentó de manera oficial. Su presidenta, Lola Penín, explica sus objetivos, entre los que se encuentra la recaudación de dinero para contratar a un abogado que les asesore sobre los derechos del menor, la búsqueda de una sede y la creación de una red balear. De hecho, en la presentación oficial la semana pasada asistieron dos madres de Menorca.

¿Cuándo se puso en marcha?

-Cuando fui a la reunión del colegio a comienzo del curso me dijeron que no estaría la intérprete de signos y me entró la rabia y el coraje. Empecé una recogida de firmas y conseguí 1.600 firmas en tres días. Los padres empezaron a ponerse en contacto conmigo e hice un grupo de whatsapp denominado «Padres Coraje» y nos fuimos conociendo. Empezamos a reunirnos para ver las necesidades de cada uno y de ahí nació la idea de hacer una asociación.

¿Cómo se encuentra ahora?

-Hay quince socios. Todos son padres de niños con necesidades de diferentes colegios pero se puede asociar quien quiera. No hace falta tener hijo ni familiares sino cualquiera que esté por la causa será bienvenido.

Hay otras asociaciones que tratan también a niños con necesidades.

-Sí, pero hacen terapias y nosotros no. Queremos ser una asociación que vaya de la mano de otros colectivos pero reclamamos a la administración que se cumplan los derechos de nuestros hijos. En sanidad no puede estar un niño un año y medio esperando para un dictamen y después otros tres meses hasta que le pongan los recursos necesarios. Es tiempo perdido.

¿Dónde hay más carencias en sanidad o en educación?

-En los dos sitios. En sanidad deberían sustituir de manera inmediata a los profesionales cuando están enfermos como en educación. Eso supone que las citas concertadas de hace un año se anulen y se retrasen. Nuestros hijos necesitan aprender rápido y para ellos es muy necesario.

¿Y en educación?

-Que se replanteen los criterios a la hora de asignar el apoyo escolar en las escuelas. Nuestros niños no son números. Hay que cubrirles las necesidades que ellos tengan, hay unos que necesitan más recursos que otros.

¿Han encontrado sensibilización?

-Sí, pero faltan recursos. Hemos hecho las peticiones a las administraciones y estamos esperando a que nos contesten.

Una de sus reivindicaciones es la FP adaptada.

-Sí, pero nos han dicho que es inviable. Sólo hay una que es de cocina y sin titulación. No nos vamos a parar. Queremos un presente y un futuro para nuestros hijos. Una FP adaptada sería una buena solución para muchos niños.

Es madre de un hijo de 10 años que es sordo. ¿Cómo es su situación?

-Mi hijo es muy feliz en su presente, yo pienso en su futuro. Pienso que será un futuro brillante porque mi hijo va a un colegio inclusivo como es el Poeta Villangómez. No viviré lo suficiente para agradecer todo el trabajo que han hecho. El niño no hablaba a los tres años y ahora no para. Jamás he visto que lo hayan tratado de manera diferente. Recibe mucho cariño por parte de alumnos, profesores y padres de sus compañeros. Mi hijo, que adora el fútbol, celebró su cumpleaños e invitó a un amigo suyo con discapacidad que no le gusta el balompie. Estuvieron jugando al fútbol hasta que llegó su amigo, entonces se paró el partido y se pusieron a jugar a otra cosa. Los niños se adaptan.

APIES rechaza las aulas UEECO y los centros de educación especial.

-Creemos que la educación inclusiva beneficia a todo el mundo, tanto a los niños con discapacidad como el resto. La sociedad es así. Pretendemos que estén todos en un colegio ordinario con los apoyos adecuados pero lo que no puede ser escolarizarlos en un colegio ordinario y no ponerle apoyos. Entiendo que hay padres a favor de los centros de educación especial y yo lo respeto. Si la opción es tener a tu hijo contigo o en Palma, evidentemente quieres tenerlo contigo. Respeto a esos padres pero que sea una decisión de ellos no una imposición. Me duele en el alma que una madre con un niño discapacitado diga que le duele que su hijo vaya al colegio porque retrasa a la clase. La madre no se tiene que sentir culpable sino la administración por no poner los recursos para que esos niños estén atendidos y los demás estén aprendiendo a un ritmo normal. Todos saldríamos beneficiados. Tenemos mucho que enseñar y aprender. Los niños con discapacidad aprenden a otro ritmo pero nos enseñan muchísimo.

DATOS

Sede. No cuenta aún con un local.
Contacto: asociación.apies@gmail.com; facebook asociacion.APIES, twitter@AsociacionAPIES y teléfonos 636709263 y 650668870
Actividades: charlas y encuentros encaminadas a la promoción de la educación inclusiva.
●Para realizar su aportación, Colonya Caixa Pollença ES20205600156920089 23522