Una ‘klosing fiesta’ por todo lo alto en Sueños de Libertad

Con el sol todavía brillando, la tercera jornada del festival Sueños de Libertad arrancó el sábado por la tarde con los temas pinchados por el dj Jordi Cardona, quien se encargó durante toda la velada de amenizar las esperas entre bandas con el objetivo claro de que nadie parara de bailar y disfrutar. Más tarde, la fusión de rock, pop y soul llegó con la banda Aurora & The Betrayers con quienes el público no paró de bailar. Aurora García, cantante de la banda, agradeció que se siga apostando por la música en directo. Ya con el atardecer casi en marcha, el tambor de Miguel Campello empezó a sonar para repasar, con su particular estilo por bandera, su amplio repertorio. Campello actuó por primera vez en Ibiza para presentar su último trabajo, Agua, pan y vino, además de repasar temas de su época como El Bicho, como Parque de Triana, De los Malos o Locura. La revolución de Sueños de Libertad continuó en el escenario con Amparanoia, que arrancó gira en Ibiza y cuyos temas Buen rollito o Que te den fueron de los más cantados y, por supuesto, bailados por sus seguidores. Parecía que la tranquilidad iba a llegar con De Pedro, pero el artista de letras profundas mantuvo alta la energía de la última noche de festival. Y el blues más eléctrico llegó más tarde con Fantastic Negrito, ganador de un Grammy al mejor disco de blues contemporáneo. Tras este derroche de actitud y estilo llegó el momento más esperado por centenares de ibicencos que han crecido y evolucionado con la música de Statuas d. Sal. Con una botella de hierbas en el escenario, ganas de pasarlo bien y falda incluida, David Serra, Omar Gisbert, Joan Barbé, Fernando Hormigo y Juanma Redondo demostraron qué es el rock made in Ibiza. Payaso fue el tema que eligieron para empezar, pero la banda ibicenca deleitó a sus fans con temas tan míticos como Como un gato Mojado,Un día es un día, Puntos Suspensivos, Fácil, Imbécil y, como no podía ser de otra manera, sonó Merengue como gran colofón final, tema con el que el público vibró. Una auténtica klosing fiesta para la tercera edición de esa aventura llamada Sueños de Libertad.