Desde el Ayuntamiento aclararon ayer que el domingo, día en que se puso en conocimiento de las autoridades municipales el hallazgo, se mandó al lugar a una patrulla de la Policía Local y a personal de la brigada de Obras.
Los agentes acudieron con el objetivo de determinar el lugar extacto de la propiedad y comunicar a sus dueños que retirasen aquellos elementos. De no hacerlo, la brigada tenía la orden de cortar el alambre y eliminar los elementos de sujeción.
El Ayuntamiento explica que cuando los funcionarios llegaron a los terrenos, comprobaron que el alambre estaba colocado en un muro lateral de cerramiento de una parcela, en la medianera de dos parcelas privadas. «Al estar en ámbito privado, sin ser camino público, zona de paso o estar en zona de dominio público marítimo-terrestre (al menos, en una primera inspección, no lo estaba) –subrayó un portavoz municipal– lo que se hizo fue levantar acta y pasar nota a los servicios técnicos del Ayuntamiento para que pudieran estudiar la situación legal de estos elementos y determinar si era legal o no su ubicación, si requerían permisos o si había que informar a alguna otra administración».
El Ayuntamiento contactó ayer con los propietarios antes de seguir cualquier otro procedimiento, pero residen en el extranjero. «Se ha hecho y se les ha comunicado que considerábamos que eran elementos peligrosos y se les ha pedido su retirada», informaron estas mismas fuentes. Los dueños de la casa accedieron a la solicitud «sólo que, al residir fuera de la isla y tener la casa como segunda residencia, han pedido unos días de margen para poder gestionar la retirada». «Si dentro de unos días no se ha procedido a eliminar los alambres, entonces actuaremos directamente», subrayaron desde el Ayuntamiento de Santa Eulària.
LA NOTA
Unos 1.000 euros por 100 metros de alambrada
La concertina es la versión moderna del alambre de espino, diseñado para prevenir intrusos a lo largo de un perímetro. El alambre está fabricado de acero templado –casi imposible de cortar con herramientas normales– y provisto de cuchillas en forma de arpón. Las cuchillas están diseñadas para penetrar y enganchar. En diversas páginas de internet se venden 10 metros de alambrada por unos 100 euros, por lo que proteger un perímetro de 100 metros tendría un coste de unos 1.000 euros. Las concertinas se hicieron populares después de ser instaladas en las vallas fronterizas de Ceuta y Melilla.
1 comentario
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Muy bien, no todo vale.