Imagen de la rueda de prensa de GEN-GOB. | Marcelo Sastre

Unas 11.000 embarcaciones fondearon el pasado mes de agosto sobre las praderas de posidonia frente a ocho playas de Ibiza, según el informe elaborado por la asociación ecologista GEN-GOB, la Fundación para la Conservación de Ibiza y Formentera y Adessium Foundation. En el mes de agosto y en el conjunto de las playas analizadas, que son Talamanca, Es Xarco-es Jondal, Porroig, Cala d'Hort, Cala Vedella, Cala Salada, Benirràs y Cala Llenya, hubo una media diaria de 500 embarcaciones fondeadas, de las que más de 340 (70 %) lo hicieron sobre las praderas de posidonia.

Según ha explicado el representante del GEN-GOB Marià Marí, el impacto de estos fondeos supone la degradación de entre dos y cuatro hectáreas de praderas de posidonia anualmente. Para los ecologistas, la situación es «dramática» debido a los efectos «irreversibles» de estos fondeos.

Los datos del informe, recopilados con la colaboración de los voluntarios de Xarxa de Vigilància Ambiental, constatan que la regulación de los fondeos «debe ser una prioridad para todas las administraciones, ya que tienen como obligación, la conservación de las praderas de Posidonia oceánica, de la que depende el equilibrio sedimentario y la calidad de la arena y de las aguas de todo el litoral».

Por zonas, destaca la bahía de Talamanca, en Ibiza, donde durante los meses de verano, hay una media diaria de 140 fondeos, de los que el 75 % se hacen sobre posidonia. En es Xarco y es Jondal hay una media de 50 fondeos diarios y entre un 25 % y un 35 % son sobre posidonia. En este enclave de la costa de Sant Josep en agosto se registraron 2.200 fondeos frente la los 2.100 contabilizados en Porroig. En este último punto, más del 80 % de las embarcaciones fondea sobre las praderas de posidonia. Se estima que unas 30.000 embarcaciones visitan anualmente las islas Pitiusas.

El GEN ha lanzado una serie de recomendaciones entre las que destacan la realización de un estudio que determine la capacidad de carga del litoral de

Ibiza y Formentera para delimitar y restringir las zonas de fondeo, habilitar un servicio ágil para la recogida de aguas negras y productos contaminantes de las embarcaciones en todos los puertos, y la retirada de los fondeos fijos para sustituirlos por fondeos ecológicos. Además, reclaman la incorporación en las cartas náuticas de las praderas de posidonia, así como delimitar las zonas de baño a los 200 metros de la costa y la retirada de las estructuras de fondeo en desuso