Los pasajeros tuvieron que regresar varias veces a la zona de mostradores.

Una treintena de pasajeros se quedaron ‘colgados’ la noche del sábado en Ibiza por una cadena de demoras y problemas técnicos en el vuelo V73856 de la compañía Volotea.

Según explicó una pareja de afectados, la conexión Ibiza-Zaragoza estaba programada para las 20.50 horas. Minutos después de las 20.13 la compañía avisó, vía mensaje, que el vuelo había sufrido un retraso «por causas operacionales». En el mismo mensaje se les informaba que les ofrecían un vale para una consumición. «El problema es que nos remitían al mostrador de la compañía cuando ya habíamos pasado el control de seguridad», advirtió uno de los afectados. Los pasajeros salieron a la zona de mostradores y una vez allí comprobaron que el vuelo iba acumulando retrasos.

Pasada la medianoche les informaron que procedían a realizar el embarque. «Nos tuvieron un buen rato en el autobús y cuando finalmente accedimos al avión y ya estábamos sentados, nos comunicaron que teníamos que abandonar el aparato. Nos comunican que hay un problema técnico y que tenemos que abandonar el avión». Pero esta no fue la última adversidad que sufrió el pasaje del vuelo V73856.

Una vez desembarcados , y según narran los afectados, una responsable de la compañía les informó que están esperando un mecánico para solventar un problema y les ofrece una hoja de información y unos vales de 5 euros para consumición. Minutos después les comunicaron que el avión estaba reparado pero que el destino era Verona y no Zaragoza. A las 04.00 horas y, ante la protesta de los afectados, la compañía ofreció a los pasajeros el traslado a un hotel de Ibiza. Los afectado lamentaron el trato recibido y ayer por la tarde todavía estaban pendientes de conocer la hora de su vuelo.