Sergi Arola: «Cada vez estoy más aburrido del tema de la creatividad»

-¿Por qué ha decidido repetir la experiencia Vi Cool en Ibiza?
-Este es el cuarto año. Alberto Torres y todo el equipo del Hotel Aguas de Ibiza está muy contento ya que las pasadas temporadas nos ha ido muy bien, por eso estamos aquí otro año más. Todo era bueno para repetir. Además, dentro de lo que es la filosofía del local, la gente lo ha entendido a la perfección; somos un local casi alternativo en Ibiza porque huimos de la jet set y de los precios de jet set. Somos casi humanos a nivel de precios dentro de lo que es las grandes propuestas de cocineros y restauradores que lo hacen mucho mejor que yo.

-¿Qué es Vi Cool?
-Vi Cool es una manera de comer muy sencilla, como me gusta comer a mi cuando estoy con mis amigos, picoteo al centro de la mesa y pocas cosa más, con platos bien definidos, sencillos con ningún tipo de pretensión y sobre todo intentando dar una relación calidad precio imbatible.

-¿Por qué eligió este nombre para sus proyectos más informales?
-Porque nos pareció un nombre muy chulo. La traducción sería ser guay o ser cool, pero está escrito con v y separado queriendo significar el culo de las copas de vino, que es concepto que define muy bien como entendíamos esta manera de comer.

-¿Qué resaltaría de la carta?
-Los platos clásicos míos. Las bravas, los tartares… que están funcionando en la isla y que a nosotros nos encantan. Queríamos hacer un restaurante para todo el mundo pero muy centrado en la gente de Ibiza que muchas veces está casi maltratada por esas cadenas que primero ponen el precio, luego el nombre y luego el plato. Nosotros buscamos un precio acorde y adecuado para la mayoría de la gente de la isla. Esperamos este año repetir, sino aumentar la aceptación.

-¿Hay mucha diferencia entre la carta del Vi Cool Ibiza y la del Vi Cool Madrid?
-No, en absoluto las patatas bravas son las mismas en Ibiza que en Madrid y en cualquier sitio. Hay una especie de obsesión por inventar. Vamos a desmitificar el mito de inventar; cuando yo pido una caldereta, por ejemplo, quiero una caldereta y no quiero otra cosa. Cada vez estoy más aburrido del tema de la creatividad, parece que da igual si das algo malo si es nuevo. Yo prefiero ofrecer lo de siempre y no me preocupa si alguien quiere algo nuevo. Hay unos restaurantes estupendos que hacen cosas nuevas, que echan humo, tecnología nuclear, lo que quieras, pero eso no es Vi Cool. Vi Cool es un bar de vinos, no es un restaurante de cocina creativa. Yo solo reedito el concepto pero no los platos.

-Este año han incorporado un bartender nuevo, Iván Talens. Háblenos de él.
-Si, este año tengo el placer de contar con él. Es uno de los mejores, sino el mejor. Para mí es un auténtico lujo. Lo conozco desde hace tiempo, ningún bartender del país conoce a Sergi Arola como él. Iván estuvo dirigiendo el nuestro restaurante la Broche, en Madrid, y allí hemos trabajado durante mucho tiempo juntos. Ha sido parte de la génesis de la cocina de Sergi Arola.

-¿Qué proyectos tiene en marcha?
-Ahora mismo hemos acabado Marterchef Chile, este fin de semana es el último programa. Estamos también trabajando en el Lap de Sintra, que para mí es el heredero del restaurante que teníamos en Madrid y, la verdad, que no se puede pedir mucho más. Ha sido un año complicado, un año raro, un año de transición pero yo no soy muy dado a la autocompasión y a la melancolía y menos en el mundo laboral. Ha habido cambios, pero lo que sigue habiendo es ilusión, ganas y muchísimo compromiso y mientras eso siga vivo, profesionalmente, yo sigo vivo.