El proyecto, que ha sido redactado por la empresa Eivinatura y para el que el Consistorio prevé un desembolso de 3,07 millones de euros, se llevará a cabo por fases durante los próximos tres inviernos para provocar las menos molestias posibles durante la temporada turística.
El alcalde de Santa Eulària, Vicent Marí, explicó que esta carretera de casi tres kilómetros de longitud es la que conecta los principales núcleos turísticos del municipio con Santa Eulària y que el objetivo de esta reforma integral «es conectar mejor Santa Eulària y es Canar y dar seguridad a los peatones y a los automovilistas porque es una vía muy transitada y en su momento se colocaron varios badenes para reducir la velocidad y evitar accidentes graves».
Fases
La primera de las obras que se ejecutará será la construcción de la rotonda de 29,5 metros de diámetro en el cruce que conduce a s’Argamassa, Cala Martina y Cala Pada. Esta entrada y salida de vehículos a zonas con mucha actividad turística genera situaciones de peligro que se solucionan con la instalación de esta rotonda, una mejora que ya se llevará después del verano.
La rotonda estará iluminada por ocho farolas y tendrá un disco remontable de seis metros que permitirá a los camiones de gran tonelaje pasar por encima de él y circular por la vía sin ningún problema.
A continuación se remodelaría desde la rotonda hasta la entrada de es Canar con la incorporación de un carril bici de tres metros de ancho dividido en dos carriles, segregado de la calzada y que se compartiría con la zona peatonal. Aquí los vehículos tendrán un espacio de 3,5 metros para cada carril y un arcén de un metro. Vicent Marí agradeció a los vecinos que hayan cedido parte de sus terrenos para llevar a cabo estas mejoras con la condición de que se soterraría el cableado eléctrico y telefónico.
La siguiente fase se llevaría a cabo en la entrada de es Canar. En estos 300 metros la calzada para vehículos y el carril bici se estrecharían y se respetaría la acera ya existente.
Por último, se llevaría a cabo la remodelación desde el barrio de Can Sançó hasta el cruce de s’Argamassa (1.290 metros), donde se dejaría una calzada de 6,30 metros, un carril bici de 2,25 metros y la acera actual. Esta fase, sin embargo, no se llevaría a cabo hasta que el Ministerio de Medio Ambientetermine las obras de ampliación de la depuradora, ya que muchas de sus canalizaciones pasan por debajo de la carretera.
El carril bici estará iluminado por 235 balizas en todo su recorrido y separado de la calzada mediante una bionda metálica revestida de madera, al estilo de la instalada en la carretera de Sant Miquel. La circulación por toda la vía se limitará a 40 km/h.
El alcalde de Santa Eulària apuntó que en breve se pondrá en marcha la licitación de las primeras fases y que la financiación para llevar a cabo este proyecto saldrá de los remanentes del presupuesto.
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