La velocidad media del tráfico que circula por las principales vías del centro de Vila durante la temporada estival oscila entre los 10 y los 17 kilómetros por hora, según los datos obtenidos por PERIÓDICO de IBIZA Y FORMENTERA con la ayuda de una aplicación móvil un día normal en torno al mediodía.
Una intensidad de circulación que igualaría el tráfico de Vila al de grandes ciudades españolas como Madrid donde la velocidad media en sus centros urbanos es similar a la registrada este verano en Ibiza. Según un informe del Ayuntamiento de Madrid de 2015, la velocidad media en el centro de la capital española se sitúa en 11,89 km/h.

El peor trayecto

De todos los recorridos que suelen hacer los vecinos del municipio de Vila, uno de los más largos y tortuoso es el que va desde la avenida Ignasi Wallis hasta la plaza de la Catedral a una velocidad de 10 km/h. Un trayecto de apenas 3 kilómetros que tuvo una duración de 18 minutos, que es lo cuesta normalmente viajar por carretera desde Vila a Sant Antoni, y que ha aumentado considerablemente tras la peatonalización de Vara de Rey y los cambios circulatorios.

La intensidad de tráfico es también muy elevada en las avenidas Bartomeu de Roselló e Isidor Macabich, un trayecto que no llega a un kilómetro y medio pero que registra frecuentes atascos, especialmente por la concentración de autobuses que paran junto a los Juzgados. Tampoco en el primer cinturón de ronda, a lo largo de la avenida de la Pau, la fluidez del tráfico mejora demasiado a lo largo de los dos kilómetros de recorrido a pesar de que la velocidad media en este caso aumenta hasta los 17 km/h.

Un tráfico infernal que, en temporada alta, es el resultado de sumar los residentes que acceden a la ciudad en coche a la gran cantidad de turistas, muchos de ellos despistados, y de repartidores que no tienen más remedio que entrar a la ciudad para suministrar material a los diferentes establecimientos.

Para intentar mejorar la circulación en el municipio, el Ayuntamiento de Eivissa prepara una segunda serie de cambios que se comenzarán a aplicar en octubre y que consistirán en hacer de sentido único las principales avenidas de la ciudad.

DURACIÓN DE TRES TRAYECTOS POR EL CENTRO DE VILA

De Ignasi Wallis a Dalt Vila

Llegar en coche a la plaza de la Catedral en Dalt Vila desde la avenida Ignasi Wallis cuesta 18 minutos a 10 km/h para un trayecto de apenas 3 kilómetros. Acceder al casco antiguo de la ciudad solo es posible para vecinos y vehículos autorizados que, tras los cambios de circulación que entraron en vigor en octubre del año pasado, tienen que dar un rodeo importante.

Bartomeu de Roselló e Isidor Macabich

El trayecto para atravesar estas dos avenidas del centro de Vila que suman poco más de un kilómetro tiene una duración de unos 7 minutos, una velocidad de 12 km/h de media. El punto con mayor intensidad de tráfico se
concentra en la avenida Isidor Macabich, especialmente entre la parada de autobuses junto a los Juzgados y la
plaza Enric Fajarnés i Tur a la altura de la fuente.

Pr imer cinturón de ronda

Recorrer los dos kilómetros que separan la rotonda de ses Figueretes de la conocida como de los podencos cuesta 7 minutos en un día normal de verano sin los frecuentes colapsos que suelen registrarse en temporada alta en la E-10. Aunque la función de este cinturón de ronda es hacer el tráfico más fluido, la velocidad media del tráfico es de 17 km/h.