Imagen de archivo del faro de Tagomago cuando el GEN hizo la excursión para reivindicar el uso público del islote.

El Consell d’Eivissa y el Ayuntamiento de Santa Eulària insisten en que mejor manera de aumentar la protección de Tagomago es la figura de reserva natural. La máxima institución insular propone, además, un «cambio de estrategia» ante una «propiedad que ha dejado claro que no quiere cumplir las normas de este espacio natural protegido», explicó ayer el conseller insular de Medi Ambient, Miquel Vericad, quien señaló que hay que «favorecer el disfrute del espacio público, especialmente la costa y la carretera que lleva al faro, que es zona de servidumbre». En este sentido, el Consell d’Eivissa quiere recuperar el uso público a través del faro: «La propuesta es conseguir dotar, a través de una posible reforma de las instalaciones del faro, la creación de una instalación que necesite de personal fijo y de vigilancia y mantenimiento con un modelo como el de sa Conillera. Por su inaccesibilidad, vecinos y administraciones nos enteramos de lo que pasa en Tagomago a posteriori y la única forma de cambiar esto es que haya vigilancia. No es algo inmediato, pero es una propuesta que está encima de la mesa, que ya se habló con el Govern y que se volverá a hablar con el Ejecutivo autonómico, y que también he hablado con la concejala de Medi Ambient de Santa Eulària, Antònia Picó. Es un problema difícil de solucionar», afirmó Vericad, quien insistió en que la «única manera de mantener la calidad de este espacio natural es que haya vigilancia fija para que no hagan lo que quieran». Cabe recordar que, según aparece en diferentes perfiles de Instagram, esta semana se celebró una multitudinaria fiesta en la mansión del islote. «Si se confirma que se hizo esta fiesta, como parece que así ha sido por las publicaciones que hay en Instagram, es una decepción más que tiene esta isla con la propiedad porque no respetan las normas de convivencia», señaló el conseller, quien apuntó que en más de una ocasión ha transmitido su malestar con su manera de actuar a los representantes de la propiedad para que se lo hicieran saber a los dueños.

Por su parte, la primera teniente de alcalde de Santa Eulària, Carmen Ferrer, afirmó que la protección de Xarxa Natura es «muy débil» y que es «necesario que el islote sea reserva natural» para evitar que se hagan fiestas como la que tuvo lugar esta semana. Ferrer destacó que esta figura de protección no es incompatible con la reserva marina.

LA NOTA

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Cabe recordar que la plataforma ciudadana ‘Tagomago, parque nacional’ reclama también una mayor protección para el islote.