El Ayuntamiento de Sant Antoni ha abierto una investigación para esclarecer cuál es la situación de las denuncias de tráfico interpuestas el pasado 31 de marzo al primer teniente de alcalde, Pablo Valdés, y conocer cuál ha sido el procedimiento seguido en su tramitación.

Según informaron fuentes municipales, el alcalde Pep Tur ‘Cires’ solicitó ayer unos informes a la jefatura de Policía y al departamento de expedientes sancionadores en materia de tráfico «para saber exactamente cuál es la situación de las denuncias y cuál ha sido el procedimiento seguido en su tramitación. Si se observan irregularidades en la tramitación de esta o cualquier otra denuncia se tomarán las medidas que correspondan», señaló el alcalde de Sant Antoni en una respuesta por escrito remitida a este medio.

Además, Cires subrayó que el equipo de gobierno «no ha dado directrices para que se deje de tramitar ninguna denuncia». Tal y como avanzó el pasado domingo PERIÓDICO de IBIZA Y FORMENTERA, Pablo Valdés fue sancionado el 31 de marzo con dos multas que sumaban 400 euros y 6 puntos por conducir sin el cinturón de seguridad puesto al tiempo que manipulaba su teléfono móvil. El primer teniente de alcalde fue parado por un guardia civil que reclamó la presencia de una patrulla de la Policía Local para la formalización de las multas ya que los hechos ocurrieron en el núcleo urbano de Sant Antoni. Han pasado cinco meses y, según las fuentes consultadas por este medio, los dos boletines sancionadores no han sido introducidos en la base de datos del Ayuntamiento.

Las multas se notificaron al denunciado en el momento ya que fue una sanción presencial. Tampoco consta el pago de las sanciones impuestas que tienen un descuento del 50 por ciento por ‘pronto pago’.

Noticias relacionadas

Diversas fuentes consultadas aseguran que lo normal es que los boletines hubiesen sido introducidos en la base en un plazo no superior a la semana. De hecho, otras multas impuestas esa misma jornada figuraban en la base de datos apenas cuatro días después.

LA NOTA

Base de datos municipal

Según las fuentes consultadas, todas las multas son ‘picadas’ en la base de datos municipal para que quede constancia del importe económico y Tesorería pueda advertir o reclamar a los vecinos las cuantías de las sanciones. Además, deben ser introducidas en la base de datos para comunicar a Tráfico la retirada de los seis puntos correspondientes a las dos acciones sancionadas. En un primer momento, fuentes municipales afirmaron que «desde el equipo de gobierno ni se paraliza ni se acelera ninguna denuncia» y añadieron que Valdés firmó las multas «y las abonará cuando le sean notificadas, cosa que no ha ocurrido todavía». 48 después, el Consistorio ha anunciado la apertura de una investigación por los hechos denunciados por PERIÓDICO de IBIZA Y FORMENTERA.