De los 431 casos positivos de la bacteria Xylella fastidiosa detectados por la Conselleria de Medi Ambient en todo el archipiélago balear, 88 pertenecen a la isla de Ibiza, según los datos facilitados ayer por el conseller Vidal.
De estos 88 casos, la mayoría corresponden a olivos, concretamente 30 ejemplares, mientras que 43 son acebuches además de dos almendros. Todos los casos en Ibiza pertenecen a la subespecie pauca, la variante más agresiva.
Estos resultados se obtienen gracias a la mejora del plan de actuación, que ha incluido una petición no oficial de la Comisión Europea, a raíz de la auditoría que llevaron a cabo los inspectores el mes de junio, que consiste en la división de las Islas Baleares en 5.600 cuadrículas de 1 km x 1 km, con el objetivo de disponer de una fotografía real de la situación a finales de año. Por lo tanto, continúan las prospecciones sobre el terreno, el análisis de las muestras y la eliminación de los resultados positivos que pueden ejecutar TRAGSA (de manera subsidiaria por medio de un encargo de gestión de la Conselleria), y los particulares.
Vicenç Vidal se reunió ayer en Palma con el sector agrario y presidió la primera mesa sectorial vitivinícola para exponer las acciones que se han llevado a cabo para combatir la bacteria Xylella fastidiosa, que se detectó en Baleares hace diez meses, y las que están previstas para el futuro.
En la reunión Vidal expuso que la Conselleria «combate la bacteria con varias líneas de actuación, que se dividen en participación, ejecución del plan de contención, investigación, experimentación y líneas de apoyo al sector».
En cuanto a los instrumentos de participación, se mantiene el Comité de Dirección creado para combatir la bacteria Xylella y nacen las mesas insulares con las organizaciones agrarias y las mesas sectorial para vid, olivo, almendro y viveristas, a propuesta del sector.