El joven fue trasladado a las dependencias policiales tras ser detenido. | Archivo - Periódico de Ibiza

Una multa de 900 euros. Es la pena solicitada por la Fiscalía para A.D., detenido por agentes de la Policía Local de Santa Eulària después golpear e increpar a los agentes que habían acudido a auxiliar a una camarera a la que estaba sujetando contra su voluntad.

El detenido pasó ayer a disposición del juzgado de guardia y el Ministerio Fiscal solicitó una multa de seis meses a razón de cinco euros diarios.

El hombre fue arrestado el sábado acusado por un presunto delito de atentado, resistencia y desobediencia a la autoridad después de agredir a varios policías locales.

Uno de los agentes compareció ayer en los juzgados para realizarle una revisión por parte del Instituto de Medicina Legal y valorar las lesiones causadas.

Los hechos ocurrieron a mediodía. La Policía recibió una llamada alertando de que un joven se mostraba agresivo e increpaba a las personas. Cuando los agentes llegaron, una patrulla de la Guardia Civil ya estaba identificando a esta persona. Dado que no se habían producido daños ni agresiones y no había denuncias de particulares, los agentes indicaron al hombre que debía abandonar el lugar sin crear problemas o sería detenido. Cuando los agentes se retiraban hacia el vehículo escucharon los gritos de varias personas que pedían ayuda. Los agentes regresaron y encontraron a A.D. sujetando fuertemente del brazo a una camarera de un local del pasaje Algemesí. Además, el hombre estaba gritando y escupiendo a la trabajadora. Los agentes se interpusieron entre el agresor y la víctima e intentaron tranquilizar al hombre, que se escondió en un portal y golpeó a los agentes que lograron reducirle y detenerle