Una votación durante el pleno de ayer en el Ayuntamiento de Sant Antoni. | Arguiñe Escandón

Los concejales del PSOE y de Reinicia rechazaron ayer condenar los actos de turismofobia, como proponía el Partido Popular en una moción, pese a destacar que estaban en contra de estos actos vandálicos. Por su parte, los ediles del PI se desmarcaron de sus compañeros de tripartito y se abstuvieron. Joan Torres alegó que su formación había presentado una propuesta parecida en Mallorca y que se abstenían «por coherencia». Tanto Torres como el alcalde señalaron que esta diferencia en el voto era un caso puntual y descartaron que el PI tenga a partir de ahora mayor presencia en los plenos.

Los miembros del tripartito pidieron al PP que retirara la moción para consensuar otro texto, a lo que el portavoz ‘popular’ se negó. El concejal de Turisme, José Antonio Ferragut, destacó que el PP «crea un problema inexistente y que es casi insignificante en la isla», a la vez que señalaba que los turistas «siempre son bienvenidos en Sant Antoni».

Pepe Sala señaló que su partido no ha creado ninguna alarma y que en Sant Antoni existen pintadas en contra de los turistas.

En el pleno de ayer se aprobó inicialmente el reglamento que regula el servicio de GPS en los taxis del municipio y el reglamento de organización del Comité Ciudadano, este último de forma definitiva. Otro de los puntos aprobados ayer fue el reglamento de servicios funerarios y las mociones para instar al Gobierno que establezca un trato igualitario para todos los usuarios de los viajes del Imserso y que los ibicencos no tengan que sufrir el sobrecoste de tener que desplazarse hasta Mallorca, y otra para estudiar la creación de una base de datos de fincas diseminadas y la implantación de un sistema de identificación para los servicios de emergencia.