El Ayuntamiento de Sant Antoni de Portmany gestionará en 2018 un presupuesto que asciende a 25,5 millones de euros, de los cuales 4,1 se dedicarán a inversión, aunque está previsto que la cuantía de la inversión se incremente en los próximos meses con la aprobación del remanente de tesorería.

Las inversiones para 2018 incluyen una nueva partida de 620.000 euros para continuar con el proyecto de eliminación de barreras arquitectónicas iniciado este año, así como inversiones para renovar la pista de atletismo (300.000 euros), acondicionar un pantalán desmontable en Cala Salada (80.000 euros) o rehabilitar diversas zonas como la plaza Coixet o el mercado payés (175.000 euros).

En este capítulo se incluirán, entre otras, una partida de 150.000 euros para continuar con las mejoras en los parques municipales (en los que ya se han invertido más de 200.000 euros) y una partida de 190.000 euros para renovar instalaciones del campo de fútbol de Sant Antoni como las gradas o los vestuarios. La inversión contemplará también un segundo pago para el Consistorio a consecuencia de una nueva sentencia judicial que obliga a desembolsar 412.000 euros por una expropiación en la urbanización Loma Pinar.

El presupuesto del Ayuntamiento se reduce un 1,7% respecto a 2017, cuando ascendía a 25,9 millones. Esta reducción es consecuencia de la eliminación de toda la deuda municipal, ya que en 2018 desaparece la partida de 1,3 millones en créditos que existía en 2017 y que ya no habrá de contabilizar el año próximo porque no se solicitará ningún préstamo. La eliminación de la deuda y de esta partida permite a la institución salir del Plan de Ajuste 2012-2022 cinco años antes de lo previsto y poder utilizar el remanente de tesorería en inversión sostenible.

A la cancelación de la deuda bancaria se suma la eliminación del alquiler de la sede consistorial que todavía se estaba pagando. El crédito hipotecario que mantiene hasta ahora la empresa pública municipal OSSAN, a través de la cual se articula el pago de este alquiler, se finiquitará antes de final de año con el abono de más de dos millones de remanente de tesorería, operación que se aprobará en el próximo pleno.

Esta cancelación permitirá incrementar en 900.000 euros la cuantía destinada a gasto corriente, lo que supone, por ejemplo, un incremento del 44% en Instalaciones deportivas, del 40% en la partida de Desarrollo rural, del 20% en Protección del Medio Ambiente o del 17% en Mantenimiento de centros educativos.