El Consell d’Eivissa ha abierto este año 224 expedientes a taxis ‘pirata’ por incumplimientos de la Ley de transporte de personas por carretera en diversas modalidades.
Se trata de un expediente más en comparación con 2016, año en el que, según la máxima institución insular, se doblaron las inspecciones gracias al Plan contra el intrusismo en el transporte de pasajeros. Según el Consell, a esta cifra deben sumarse 48 denuncias más que están tramitando los ayuntamientos de forma directa. Este año, Sant Josep tramita 30 denuncias, Sant Antoni, 10 y Vila, ocho. En 2015, el Consell tramitó 82 expedientes y en 2014, 116.
Los datos se han trasladado a los miembros de la Comisión de seguimiento del Plan contra el intrusismo, creada por el Consell y que cuenta con representantes del Govern, Dirección Insular del Estado, Guardia Civil, ayuntamientos y policías locales, que son las administraciones y cuerpos policiales que conforman los dispositivos de control, inspección y denuncia junto a las asociaciones de taxi o representantes de los sectores empresariales, entre otras.
La consellera de Mobilitat, Pepa Marí, agradeció «públicamente» a los integrantes de los dispositivos «el esfuerzo» para combatir una problemática que «sobrepasa el ámbito de las normativas del sector del transporte por carretera» ya que «detrás de esta práctica nos encontramos con organizaciones delictivas cada vez más profesionalizadas». «Por ello, el Consell seguirá reclamando al Gobierno del Estado que asuma su responsabilidad desde el punto de vista de la seguridad ciudadana», apuntó Marí.
La «profesionalización» del taxi ilegal queda de manifiesto, según la institución, con las cifras por tipología de las infracciones. En 2017 se ha mantenido la cifra de vehículos privados usados como taxis sin autorización, con un total de 60 expedientes frente a los 62 de 2016.
Por contra, se han duplicado los expedientes a Vehículos de Transporte con Conductor (VTC) de hasta nueve plazas con autorización de otra comunidad autónoma, pero que operan en Ibiza de manera irregular. En concreto, se han abierto 66 expedientes frente a los 33 del pasado año.
Según el Consell, «hacen el agosto en Ibiza, superando los límites permitidos». Esta actividad irregular está en expansión ya que implica una sanción leve de 601 euros frente a los 6.000 euros del taxi pirata ‘clásico’, «lo que demuestra la profesionalización de la práctica irregular del taxi pirata». Marí recordó la aprobación en mayo del decreto ley de medidas urgentes del Govern que autoriza al Consell a crear un registro de esta actividad de los VTC.
Respecto al resto de sanciones, corresponden a transportes privados irregulares, con 26 expedientes; VTC sin autorización, 12 expedientes frente a los 87 del pasado año; dos expedientes por venta individual de plazas de autobús y 58 expedientes por sanciones leves en relación a otros incumplimientos de la Ley en materia de transporte de pasajeros por carretera.
Por tipología, ha habido 60 denuncias por transporte ilegal a cargo de un conductor particular y 26 a locales que usan el vehículo de empresa incumpliendo la normativa, entre otras.